Vitoria. Finiquitada la operación Bjelica con la gran esperanza serbia en el bolsillo del Baskonia, la entidad vitoriana trabaja ya en la recomposición del resto de piezas para la nueva plantilla, con dos hombres cuyo futuro pende ahora mismo de un hilo: Walter Herrmann y Lior Eliyahu. La continuidad del primero queda en entredicho con la llegada del antiguo alero del Estrella Roja, pero realmente es el segundo el que tiene la llave de la confección definitiva del cuadro baskonista. El jugador israelí quiere marcharse y el Maccabi quiere que regrese, pero todo queda a expensas de que el tira y afloja económico con el club azulgrana se resuelva lo antes posible.

Lejos de la capital alavesa, en Granada, una de las piezas más codiciadas del mercado español aguarda acontecimientos. Pablo Aguilar, repescado hace unas semanas del Granada por el Real Madrid, reconoció ayer a este periódico que el Caja Laboral se ha interesado por sus servicios de cara a la próxima temporada. "Sé que el Baskonia ha hablado con el Real Madrid, pero por lo que sé están pendientes de lo que ocurra con Eliyahu", explica el jugador de 20 años, recién aterrizado de Gran Canaria tras convertirse en el primer descarte de Sergio Scariolo en la selección española. Como es bien sabido, el equipo alavés necesita un cuarto jugador español -Ribas, San Emeterio y Oleson son los tres actuales- para cumplir con las exigencias de la competición en materia de cupos. Esto, unido al posible retorno de Eliyahu a su hogar, dejaría libre un hueco en la posición de cuatro que el Baskonia podría completar con la llegada de este prometedor interior.

un traspaso abultado Aguilar no entra en los planes del Real Madrid, que abonó cerca de 350.000 euros al conjunto granadino para repescarlo a mediados de julio, y ahora pretende hacer caja con un traspaso -o una posible cesión- a otro equipo. En principio, la entidad blanca habría solicitado una cantidad entre 540.000 y 600.000 euros a un Baskonia que, de momento, no tiene prisa por completar su roster, y el propio jugador también se muestra dispuesto a esperar lo que haga falta para no tomar una decisión equivocada.

"El Caja Laboral ilusiona a cualquiera. Es un equipo muy grande, con muchísimas posibilidades para un jugador joven. Pero hay que esperar a ver cómo van las cosas e ir poco a poco, porque ahora mismo soy jugador del Madrid y hasta que no transcurran unos días no sé que pasará conmigo. Pero la opción del Baskonia me atrae mucho, ir a un equipo trabajador, con muy buenos jugadores y muchos que han estado allí y han dado después el salto a la NBA", recuerda Aguilar. Y es que, al igual que ocurre con Nemanja Bjelica, el ex jugador del Granada tiene el sueño de recalar un día en la competición norteamericana, e incluso en el mes de mayo partió a Estados Unidos para entrenar con varias franquicias, entre ellas los propios Timberwolves, dueños de los derechos del último fichaje baskonista. Pero, por el momento, si Pablo Aguilar quiere cumplir su sueño deberá aparcarlo durante unos años para progresar y mejorar su juego. Y para eso, necesita un destino en el que desarrollar sus cualidades. "No me importaría irme cedido, pero lo que no veo claro es quedarme en el Real Madrid, porque sería muy complicado jugar al contar ya con tantos pívots. Ahora mismo lo que mis agentes y yo tenemos que hacer es esperar a que las cosas estén claras, y para eso no me importa esperar", incide el objeto de deseo azulgrana, que sólo se haría con sus servicios si Eliyahu abandona Vitoria. Mientras tanto, Aguilar permanece expectante.

De cualquier forma, la del Baskonia no es la única opción del cuatro andaluz, que asegura "llevar bien" no saber en qué equipo jugará la próxima temporada. "Mis agentes me llaman para tranquilizarme y contarme cómo van las cosas, pero sé que ésta es una época muy complicada. Por muchas vueltas que le des no se va a solucionar todo antes o después", subraya consciente de que su posible fichaje por el Caja Laboral no está únicamente en su mano.