vitoria. Apenas unos minutos después de que la bocina anunciara el final del partido, todo el mundo estaba ya más pendiente de la eliminatoria contra el Barcelona que de un partido en el que los baskonistas supieron aunar un gran trabajo defensivo con el potencial justo en ataque. Pero, por encima de todo, su billete para la final de los play off vino de la mano de un bloque baskonista bien conjuntado.
Un detalle en el que Ivanovic quiso incidir. "Un entrenador puede preparar muy bien un partido pero si los jugadores no lo hacen bien se llevará toda la culpa. Un equipo de baloncesto es un grupo de doce jugadores en el que uno puede jugar cuarenta y otro un minuto, pero con ése minuto puede ganar un partido, como ha hecho Herrmann. Ha jugado cuatro minutos, pero ha sido decisivo", se congratuló el montenegrino, que quiso felicitar, por este orden, "a mis jugadores por haber logrado un gran resultado, al público maravilloso que nos ha apoyado, y al Madrid que ha sido un gran rival".
Así, y tras asegurar que su polémica con Ettore Messina había sido "un pequeño pique al que no hay que dar más vueltas" y que su relación con el italiano sigue siendo "excelente", Ivanovic quiso dejar bien claro que el Barcelona no es un coloso imbatible. "Si hay un equipo que puede ganar al Barcelona somos nosotros. Nadie pensaba que podíamos ser segundos y que ahora podemos ganar la final", advirtió el técnico azulgrana, en una palabras que corroboraron poco después dos de los grandes pilares del triunfo en este quinto partido de la serie.
"Desde el principio se hablaba del Barça y el Madrid y se habían olvidado de nosotros. Somos el equipo con más opciones de ganar al Barcelona. No quiero ponerles arriba y que se crean los mejores del mundo, porque nosotros estamos jugando una final contra ellos y tenemos el mismo mérito de estar ahí. Van a ser partidos muy igualados, a muy pocos puntos", auguró Splitter, mientras Marcelinho Huertas subrayó que los culés "son un rival complicado, pero se les puede ganar; no son todo lo que se dice". Finalmente, Messina lamentó los errores de su equipo en "pequeñas cosas, como los rebotes, las pérdidas de balón o los tiros fallados" en el tramo final.