Vitoria. Una expectación inusitada y desconocida hasta ahora. El Real Madrid posee un tirón indudable, más si aterriza con cuatro jugadores que son leyenda viva del Baskonia. De ahí que mañana no vaya a caber ni un alma en el Buesa Arena para recibir la llegada de un conjunto merengue con numerosas caras conocidas en su plantilla.
No en vano, el recinto vitoriano registrará el primer lleno de la presente temporada en un encuentro con los suficientes alicientes como para no perdérselo. Más de 9.700 gargantas se darán cita en Zurbano para asistir al regreso de cuatro ex azulgranas como Prigioni, Vidal, Hansen y Garbajosa.
El choque, que también supondrá la despedida de Vladimir Micov de la capital alavesa tras rechazar el pasado miércoles una oferta de renovación para el próximo mes, arrancará a las 18.00 horas y será retransmitido por La 2.
Según detalló ayer el Caja Laboral, las últimas localidades se agotaron ayer "a primera hora de la mañana". Por tanto, los rezagados que intenten a última hora adquirir un billete se quedarán con las ganas de presenciar un duelo con el que el equipo vitoriano pretende recortar la desventaja con respecto a los primeros clasificados.
En ninguno de los duelos disputados por los de Ivanovic hasta la fecha se había originado un clima similar. La llegada de dos de los iconos de los últimos años con la zamarra blanca produce un morbo indudable.
