vitoria. En unos días en los que se habla más de las ausencias que de los jugadores disponibles, Dusko Ivanovic ha optado por hacer de la canción final de La vida de Brian el leitmotiv de su día a día y buscar el lado positivo a las lesiones que asolan el vestuario azulgrana. Por eso, en cuanto tiene ocasión apuesta por recalcar que su plantilla trabaja con firmeza para sobreponerse a las bajas. "A los que están para jugar los veo muy bien, con muchas ganas de luchar en el partido contra el CSKA", anticipó ayer el técnico baskonista, que sigue considerando al conjunto ruso "uno de los grandes de Europa, sobre todo gracias a su línea exterior". Tras recalcar que aguardarán a que Huertas se recupere totalmente "haya que esperar cinco días o una semana", Ivanovic subrayó el potencial de su rival de esta tarde, especialmente el de sus dos timoneles, Holden y el ex azulgrana Planinic. "Son dos bases diferentes. El primero juega muy bien en transición, rompe y organiza bien, tiene buen tiro... Planinic tiene la ventaja de su altura para jugar dentro", destacó el preparador balcánico, que reconoció la sorpresa que le causó la derrota del conjunto del ejército ruso ante el Lottomatica de Roma, y advirtió sobre el potencial de la escuadra que dirige Evgeni Pashutin "en las acciones individuales".

Finalmente, el técnico quiso lanzar un mensaje claro a la afición que poblará esta tarde el Buesa Arena. "En este momento, en el que es evidente que no estamos bien, espero que la gente esté más que nunca con nosotros", solicitó.