Padres y madres de alumnos urgen medidas de calmado de tráfico, como un paso de cebra, semáforo o cualquier otra, en la carretera que tienen que cruzar a diario los 22 escolares de la Eskola Txikia de Barrundia.

Consideran que es una intervención que se puede acometer con celeridad y, sin embargo, llevan casi un año esperando una solución, denuncian. "Este problema atañe ni más ni menos que a la seguridad de los niños y niñas que acuden a la escuela y requiere una intervención urgente", reivindica la asociación Kilimak Barrundia Eskola Txikiaren Gurasoen Elkartea. Además, solicita señales a la entrada del pueblo que informen de la existencia de un centro escolar, "como hay en casi todas localidades", apunta Aixona, una de las madres del centro.

En el municipio de Barrundia, varias instalaciones municipales que forman parte del equipamiento escolar, como el gimnasio y la biblioteca, se encuentran fuera del edificio principal de la escuela. Por ello, varias veces al día, el alumnado se desplaza caminando desde el centro educativo hasta dichas instalaciones, cruzando la carretera A-3012. Se trata de una vía que, a su paso por Ozaeta, carece de calmado de tráfico, no hay paso de cebra en el cruce, ni señalización vertical que advierta a los conductores para que reduzcan la velocidad.

Cruce sin visibilidad

Se trata, para colmo, de un cruce sin ninguna visibilidad en uno de los sentidos, debido a un edificio situado en la parte interior de la curva, así que los conductores no son conscientes de la presencia de menores cruzando la calzada hasta que están situados a pocos metros de distancia.

Ante esta situación, la asociación de madres y padres de la Eskola Txikia, en diciembre de 2020 se puso en contacto con la Diputación de Álava para exigir que se realizasen de manera urgente las intervenciones necesarias de cara a garantizar la seguridad de sus hijos e hijas. Envió un escrito rubricado por el AMPA y el alcalde de Barrundia tanto a la institución foral como a la Ertzaintza. Al no obtener solución alguna, ahora vuelven a remitir una segunda petición, firmada por el regidor de Ozaeta.

Desde la Diputación, por su parte, les aseguran que se van a poner en contacto con ellos.

"Un día vamos a tener un susto grande"

Sin embargo, el tiempo pasa y "un día vamos a tener un susto grande porque cualquier coche que pase, aunque vaya a 30 kilómetros por hora, no se ve hasta que está encima y se trata de una vía de dos carriles y con tráfico pesado de camiones", denuncia Aixona, una de las madres.

Considera la asociación de padres y madres que se trata de una intervención que puede acometerse con celeridad. En cambio, "llevamos casi un año esperando; dilatar en el tiempo la respuesta a esta demanda elemental nos parecería una negligencia temeraria. No esperemos a lamentar otra desgracia; actuemos cuanto antes", reclaman los progenitores.

Sin señalización

En este sentido, recuerdan el atropello con resultado mortal de una niña de 14 años en el barrio gasteiztarra de Zabalgana en enero del 2019. "Es inevitable que nos preguntemos qué sucedería si, en el momento en que nuestros hijos e hijas cruzan la carretera, un conductor como se enfrenta a una curva sin visibilidad, sin señalización vertical ni paso de cebra alguno, y en un pueblo donde la velocidad máxima de 30km/h es ignorada de manera sistemática", censuran en su escrito.

A día de hoy, la Ertzaintza vigila las entradas y salidas al cole de la mañana y del mediodía, pero "hay otras horas en las que los menores también cruzan la carretera para volver del comedor o ir a la gela de psicomotricidad", explica Aixona.