esuelto el problema del continente del futuro Memorial del 3 de Marzo, que 45 años después ya tiene como sede confirmada la iglesia de San Francisco de Asís, epicentro de los trágicos sucesos de aquellos días, queda pendiente la cuestión del continente. Así, ahora las instituciones implicadas -Diócesis de Vitoria, Ayuntamiento, Diputación alavesa y Gobierno Vasco- y los agentes sociales empeñados en la tarea de rescatar aquel pasado, principalmente la plataforma Memoria Gara, tienen por delante la tarea de decidir qué contar y cómo hacerlo en el emblemático edificio de Zaramaga.

En su comparecencia de mayo en las Juntas Generales de Álava, esta plataforma defendió la idea de ir "más allá" de lo que se entiende por un museo para construir "de abajo arriba" ese espacio de recuerdo. Así, Memoria Gara ha trabajado durante sus tres años de actividad en la propia memoria, en el contenido del futuro centro; en cómo transformar la iglesia en memorial; y en qué colectivos han de participar en su gestión y gestación.

La plataforma aboga por dar un espacio protagonista a los "donantes de memoria", testigos directos de aquellos hechos, y a la impunidad al abrigo de la cual se produjeron. Precisamente del papel de los testimonios del pasado es la herramienta que en otros lugares del mundo se ha habilitado para evitar la repetición y trasladar a las nuevas generaciones un compromiso radical con los Derechos Humanos.

En ese sentido, Memoria Gara afirmó que no es necesario partir de cero a la hora de definir el espacio de Zaramaga, y puso sobre la mesa cuatro ejemplos concretos.

Sitio de Memoria ESMA

Casino de oficiales y centro de tortura

Además de por el número de asesinatos cometidos, la dictadura que sometió a Argentina entre 1976 y 1983 se distinguió por su sadismo. Por ello no es de extrañar que el principal centro de detención y tortura del régimen, de entre los 600 que se habilitaron, compartiera espacio con el Casino de Oficiales, donde se relajaban los altos cargos del Ejército, en la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA) de Buenos Aires.

En mayo de 2015, tras varios años de pugna de los movimientos de Derechos Humanos y de debate social y político en Argentina, se inauguró el Museo Sitio de Memoria ESMA con una narrativa basada en los testimonios recogidos en el Juicio a las Juntas de 1985 y en los juicios de lesa humanidad reiniciados a partir de 2004. En esa línea de escuchar a la víctimas para educar, la misión del museo es "contribuir a conocer, vivenciar y comprender las violaciones a los derechos humanos cometidas por el Estado argentino, propiciando un diálogo intra e intergeneracional en el presente y hacia el futuro".

En lo concreto, ese espíritu se materializa en visitas periódicas de estudiantes de instituciones educativas de nivel medio y superior al lugar en el que hace cuarenta años se produjeron los robos de recién nacidos que forzaron el nacimiento del movimiento Abuelas de Plaza de Mayo, el espacio por el que pasaron alrededor de 5.000 personas antes de desaparecer, en buena parte de los casos arrojadas vivas al mar desde un avión.

Robben Island

La historia de Mandela, y de muchos otros

En esta pequeña isla ubicada a una docena de kilómetros de Ciudad del Cabo, de gran valor natural, forjó su leyenda Madiba, el activista que luchó contra el apartheid sudafricano y lo venció desde una celda. Dieciocho de los veintisiete años que estuvo encerrado Nelson Mandela los pasó en Robben Island, un presidio por el que, no obstante, pasaron otros muchos presos políticos cuyos testimonios se han recogido en el mismo sitio en el que penaron. Entre ellos Govan Mbeki, padre del expresidente Thabo Mbeki, y Kgalema Petrus Motlanthe o Jacob Zuma, que como Mandela llegaron a presidir el país.

Hoy la isla, declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, es un museo en el que se promueve el compromiso con el desarrollo y los Derechos Humanos a través de campamentos juveniles organizados por diferentes asociaciones, o de los Campamentos Juveniles de Construcción Nacional (Nation Building Youth Camps), llamados a fomentar el concepto de ciudadanía entre los más jóvenes.

Museu da Resistência e da Liberdade

Un espacio frente a la "amnesia excusadora"

La Cadeia do Aljube de Lisboa fue la cárcel donde, entre 1928 y 1965, el régimen dictatorial cuyo máximo exponente fue António de Oliveira Salazar encerraba a sus presos políticos. Hoy día acoge el Museo de la Resistencia y la Libertad, dedicado a la memoria de la lucha contra la dictadura y la resistencia a favor de la libertad y la democracia.

Según sus propios gestores, el centro, de titularidad municipal, vino a llenar un "vacío", la "amnesia excusadora" en torno al medio siglo de represión que sufrió Portugal. También en este caso, como en la ESMA o en Robben Island, se pretende utilizar la memoria como material para "la construcción de una ciudadanía responsable". Así, da a conocer aquel régimen que murió con la Revolución de los Claveles que encabezaron los militares de Portugal, que devolvieron la democracia al país.

El museo busca "dar voz a las víctimas y mostrar lo largo y difícil que es el camino de su rehabilitación, imponiendo la verdad y el ejemplo al silencio y al engaño", así como "honrar a los resistentes que se atrevieron a entablar una lucha desigual y siempre amenazados por la persecución y el encarcelamiento, la tortura, el exilio, la deportación y muchas veces la muerte".

Londres 38

El vestíbulo de baldosas negras y blancas

Lo único que veían los prisioneros políticos que entraban, forzados a mirar hacia el suelo, en el centro de detención, tortura y exterminio de la calle Londres, número 38, de Santiago de Chile, era un suelo de baldosas negras y blancas. Ese era el elemento común que los supervivientes aportaban para identificar el lugar, y el elemento que hoy, de forma simbólica, recuerda lo sucedido. Así, el pavimento de la calle Londres está jalonado de placas de mármol blanco y granito negro. En el número 38 sigue en pie el centro de detención, ahora un museo en cuya gestión participan familiares de las víctimas, supervivientes de la represión, activistas de derechos humanos, militantes de la memoria y otros agentes sociales, en busca de recuperar la memoria como "una construcción social y un derecho".

La asociación que lo dirige, ajena al Estado chileno, se constituyó como Organización Comunitaria Funcional Londres 38 en 2009 y ahora, como Corporación Londres 38, espacio de memorias, divulga con entrevistas y testimonios, entre otras actividades, lo ocurrido en Chile entre 1973 y 1990.

Llegó a ser presidente de Sudáfrica y Premio Nobel de la Paz, y un símbolo de la defensa de los Derechos Humanos. Pasó 18 de los 27 años que estuvo encarcelado en la prisión de Robben Island.

Sitio de Memoria ESMA. Avenida del Libertador 8151/8571

Ciudad de Buenos Aires,

(C1429BNC) Argentina. 'http://www.museositioesma.gob.ar/'.

Robben Island Museum. Robben Island Museum, Private Bag Robben Island, Cape Town, 7400. 'https://www.robben-island.org.za/'.

Museo da Resistência e da Liberdade. Museu do Aljube

Rua de Augusto Rosa, 42 ? 1100-059 Lisboa. 'https://www.museudoaljube.pt/'.

Londres 38. Barrio París-Londres 38, Santiago de Chile.

'https://www.londres38.cl/1937/w3-channel.html'.

5

Cinco personas fueron asesinadas en Gasteiz el 3 de Marzo de 1976 y en las jornadas sucesivas; Pedro María Martínez Ocio, Francisco Aznar Clemente, Romualdo Barroso Chaparro, José Castillo García y Bienvenido Pereda Moral. Además, en Tarragona murió Juan Gabriel Rodrigo Knafo, y en Basauri Vicente Antón Ferrero.