El contenedor amarillo de recogida de envases es un foco de continuas quejas vecinales en el barrio de Zabalgana. Unas veces por el mal uso que los residentes hacen al dejar las bolsas de basura en el suelo y otras por la imposibilidad de introducir más residuos al estar lleno. Con la llegada de la nueva contrata de limpieza a la ciudad, cuando acabe el proceso de adjudicación del servicio, los contenedores van a desaparecer de las calles de Zabalgana. Así lo detalló el Ayuntamiento a los vecinos del barrio en el último auzogune celebrado en abril. "Tenemos en el horizonte cambios sustanciales que modificarán esta situación de manera drástica y que esperamos terminen con esta incómoda situación", reza el acta de la reunión.
El Ayuntamiento no se aventura a dar una fecha concreta, ya que los cambios van asociados a la toma de posesión de la nueva empresa de limpieza, pero espera que sea en un corto plazo de tiempo.
Los cambios para los vecinos de Zabalgana, barrio que dispone de bocas de recogida neumática en los portales de las viviendas o a escasos metros de ellas, van a afectar a las dos fracciones de basura más cuantiosas: orgánica selectiva, es decir, restos de comida, y envases. Para ello se cambiarán las bocas acercando los buzones a los domicilios y se ajustarán las frecuencias de vaciado para evitar que estén llenos cada dos por tres.
En las bocas destinadas a depositar los restos orgánicos, por su parte, se instalará un chip. De esta forma, sólo los ciudadanos que se apunten a este modelo tendrán la tarjeta que les permitirá utilizar estos buzones de basura.
El objetivo es, según el Ayuntamiento, acercar a los portales la posibilidad de reciclar para que aumente la tasa de recuperación de residuos en Vitoria. Además, "de esta forma, se solucionará la demanda planteada por la asociación de vecinos respecto al contenedor amarillo, que desaparecerá del barrio y será sustituido por las bocas neumáticas", explica el gabinete Urtaran.
El resto de fracciones de basura -papel y cartón, vidrio y resto- se seguirá echando dentro de los contenedores colocados en la vía pública, aunque el número de islas de recipientes aumentará un 40%, no sólo en Zabalgana sino en toda la ciudad. "Esperamos que estas modificaciones permitan una mejor gestión de los residuos en el barrio y que desaparezcan las inquietudes planteadas por la asociación de vecinos", sostiene el ejecutivo municipal.
Además del asunto relativo a la recogida de residuos, la asociación de vecinos de Zabalgana se interesó en la reunión por saber si hay algún contrato de mantenimiento del río Perretxin y solicitó, una vez más, que se limpien las parcelas vacías y se adecente la pasarela peatonal.
Envases. Con el nuevo servicio de recogida de residuos de Vitoria, los envases que ahora acaban en el contenedor amarillo se depositarán en bocas de buzones instaladas cerca de los portales de los domicilios y desaparecerá de las calles el contenedor amarillo.
Basura orgánica. En las bocas destinadas a los restos orgánicos se instalará un chip. De esta forma, sólo los vecinos que se apunten a este modelo tendrán la tarjeta que les permitirá utilizar estos buzones de residuos.
