El Ayuntamiento de Vitoria ha anunciado este miércoles que en los próximos días "cesará" su colaboración con la asociación Apasos, con la que se encuentra inmerso en un proceso judicial y de mediación.

El Consistorio gasteiztarra asegura que su nota de prensa que "compensarán a este colectivo los gastos en los que haya incurrido desde el 1 de enero para el desarrollo de las actividades que se venían conveniando y, a partir de entonces, el Ayuntamiento cubrirá con recursos propios estas tareas". "No hay por lo tanto voluntad municipal de suscribir por el momento el convenio de colaboración correspondiente al presente año", reza el comunicado del ejecutivo local.

El cese de la colaboración con Apasos "está apoyado tanto por un informe técnico como por otro jurídico", subraya el Ayuntamiento, y se fundamenta "en las desavenencias con la asociación en el proceso de mejora de la gestión del Centro de Protección Animal (CPA) iniciado en 2019 y la implantación de nuevos procedimientos que viene llevándose a cabo desde entonces".

Desde la puesta en marcha de estos cambios "han sido numerosos los desencuentros con Apasos", sostiene el Ayuntamiento. "La asociación viene mostrando reticencias a la hora de aceptar las normas de organización interna. Manifiesta también discrepancias sobre cuestiones técnicas de competencia municipal, los tratamientos veterinarios que se facilitan y la alimentación de los animales que pauta el personal técnico municipal", asegura el gabinete de Gorka Urtaran.

Además, continúa la nota de prensa municipal, "este colectivo también ha mostrado resistencia a acatar las normas de bioseguridad del centro, que marcan restricciones de acceso a la zona de cuarentena y animales enfermos. Las diferencias de criterio también afectan al modo de acogimiento temporal en hogares de animales que podrían ser fácilmente adoptables si permanecieran en el centro".

"Este enfrentamiento reiterado contra todo lo que conlleva el proceso de mejora del Centro de Protección Animal hace imposible una colaboración beneficiosa para los propios animales y para el interés general de la ciudadanía. El Ayuntamiento ha hecho propuestas y demostrado su voluntad de acercar posturas sin que esto se haya traducido en una mejora de la situación. Por ello, la vía que nos queda es el cese de colaboración por el momento. Esperamos poder recuperar la cooperación en un futuro, pero hoy por hoy es imposible", ha señalado la concejala de Deporte y Salud, Livia López.

Cambios

Por tanto, una vez finalizada la colaboración, el Ayuntamiento de Vitoria "asumirá con recursos propios las tareas desarrolladas hasta ahora por Apasos". Será el caso de los tratamientos veterinarios y de esterilización, que a partir de ahora realizará en su integridad el servicio de Salud Pública. En cuanto a la búsqueda de casas de acogida y la promoción de adopciones, "serán dos ámbitos gestionados directamente por el personal municipal". Un refuerzo y reorganización de la plantilla del Centro de Protección Animal "permitirá que los paseos y momentos de socialización de los animales puedan ser realizados también con personal municipal". Por último, se reforzarán las horas de servicio veterinario.

"Este planteamiento es el que vamos a aplicar de forma inmediata y lo hacemos con voluntad de que sea temporal. Se abre un periodo con este modo de trabajo mientras el Servicio valora la evolución de la situación", explica la concejala de Deporte y Salud, Livia López. "Pase lo que pase, el objetivo del Ayuntamiento sigue siendo colaborar con el mundo asociativo y con el voluntariado en la gestión del Centro de Protección Animal. Siempre bajo una premisa: la de garantizar la atención y el bienestar de todos los animales", concluye.

Respuesta de Apasos

Por su parte, desde la asociación Apasos indicaron este jueves que el anuncio del Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz de suspender el convenio de colaboración con Apasos "supone la consumación de la venganza contra la asociación protectora de animales, por destapar los casos de abusos sexuales en instalaciones municipales".

Según indican a través de una nota de prensa, "en el momento de redactar la presente nota no hemos recibido confirmación oficial por parte del Ayuntamiento de su decisión. El equipo de Gorka Urtaran cita desavenencias entre ambas partes pero en ningún momento hace referencia al grave asunto que se encuentra en el origen del conflicto: los abusos sexuales a voluntarias en la Perrera Municipal de Armentia y por parte de un trabajador, abusos conocidos por varios superiores que no los atajaron".

Apasos indica que desconoce los informes técnico y jurídico a los que hace referencia el Ayuntamiento y subraya que ningún representante municipal les ha comunicado problemas en el trabajo desarrollado hasta después de presentar la denuncia por abusos sexuales y pedir su apoyo hacia las víctimas: "Ese es el único motivo de desencuentro, lo vista como lo vista el Ayuntamiento".