- El confinamiento puede traer consigo que pequeños y adolescentes hagan un uso más frecuente de las redes sociales y, en general, de tecnologías y pantallas. Por eso, la iniciativa PantallasAmigas, nacida en el año 2004 con la misión de la promoción del uso seguro y saludable de Internet y otras tecnologías de la información y la comunicación, así como el fomento de la ciudadanía digital responsable en la infancia y la adolescencia, publicó el miércoles un decálogo para un confinamiento digital saludable en familia con niñas, niños y adolescentes.

Estas diez normas han sido, además, apoyadas por Twitter y Fundación Mapfre. El decálogo, que puede verse en la web www.videojuegosenfamilia.com/salud-digital/, cuenta con ilustraciones realizadas por una compañera de PantallasAmigas.

Su director, Jorge Flores, explica a DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA que las diez pautas que presentan "tienen sentido a cualquier edad", aunque en niños y niñas de 6 años, por ejemplo, la idea es que "utilicen estos recursos tecnológicos lo menos posible y siempre supervisados".

El primer artículo de este decálogo es planificar las conexiones fijando horarios límite y tiempo máximo de uso. "Creo que es importante empezar paso a paso. Vamos a empezar por cuestiones lógicas, como que a partir de determinada hora de la noche las pantallas no se usen de forma abusiva", relata. Además, explica que una hora antes de meterse a la cama conviene no usarlas, porque inhiben la secreción de melatonina, que induce al sueño.

También al levantarse recomienda postergar el uso del teléfono hasta después de desayunar, al tiempo que añade que "la cantidad, cuando es mucha siempre es mala. El hecho de tener una limitación puede ayudar a priorizar".

El segundo punto del decálogo, por su parte, hace referencia a las desconexiones obligatorias, un elemento que puede ser complementario del primero. Puede referirse a dinámicas familiares, como comidas, o que "de 18.00 a 18.30 horas no nos vamos a conectar y vamos a hacer otra cosa en familia".

Flores reconoce que en estos momentos "habrá más cantidad de uso, y puede ser hasta permisible, pero tenemos que activar más mecanismos. Podemos diversificar. Igual en vez de ver vídeos de YouTube todo el rato podemos cambiar de actividad, como jugar o buscar otras cosas". Él lo compara con una dieta, porque si se come demasiado, puede sentar mal aunque sea un alimento saludable, pero si se alcanza un punto de equilibrio recuerda que puede ser beneficioso.

Estrechamente relacionado con el aspecto de variar está el de explorar, porque "tú puedes variar pero moverte siempre dentro de lo que conoces. Esto habla de buscar activamente. Una cosa es querer cambiar de videojuego en el mismo repertorio y otra buscar nuevos". Y ahora es un "buen momento" para descubrir las diferentes capacidades que brinda Internet.

Flores enlaza además los siguientes puntos del decálogo, el 5 y el 6, que hacen referencia a compartir experiencias y a conversar sobre los intereses respectivamente. "Estos puntos van estrechamente ligados, porque sumado a compartir esas experiencias puede ser un buen momento para conocer más en profundidad los intereses de nuestros hijos e hijas y encontrar puntos en común", resalta.

En este decálogo también dan importancia a la salud física además de al tiempo de uso de las tecnologías, porque recuerda que hay que cuidar la postura, los descansos de la vista, la alimentación "siguiendo las pautas de desconexión cuando comemos" y el sueño.

También hay que tener presente el octavo punto, el de ser buen ejemplo. "A veces puede ser un reto compartido. Ser consciente de que lo haces mal y querer mejorar es lo importante. Ganas autoridad para influir", rememora.

El noveno punto invita a los padres a medir el uso que uno hace para tomar conciencia y de esta manera establecer objetivos y poder medir. "Si una aplicación me pone que la consulto equis veces ya me hace ser consciente. Con todo esto vas estableciendo dinámicas y el décimo punto te ayuda a pensar cómo se están desarrollando las cosas y de esta forma puedes cambiar los objetivos o las medidas que has estado implementando para conseguirlos. La situación es nueva y cambiante", reconoce, finalmente, Flores.

Desde PantallasAmigas aportan también varios consejos a este diario para que los padres y madres puedan seguir ahora que grandes y pequeños tienen que asistir a sus clases diarias y hacer los deberes desde casa.

Proponen, en primer lugar, ver el contenido y las actividades concretas que les son encargadas y cuáles de ellas precisan acceso a Internet. "Creo que habría que establecer unos horarios más estables para la actividad escolar, de manera que podamos saber que en ese horario el 100% debería estar dedicado a esa actividad y no a otras cosas". Añade que "también podría haber sistemas de control parental que nos ayuden a trazar, a tener constancia de las actividades que se realizan y si fuera necesario también para limitar determinados accesos o usos. Por otra parte, podemos supervisar los resultados de la actividad lectiva, si sabemos lo que les han recomendado, para saber si han cumplido".

Flores recuerda que PantallasAmigas iba a dar una serie de charlas en Álava cuando comenzaron a cerrar los colegios días antes de la cuarentena. Tienen la idea de recuperarlas pero reconocen que es "complicado, porque los centros estarán muy ocupados con lo suyo", a la vuelta.

Primer mandamiento. Planificar las conexiones fijando siempre horarios límite y tiempo máximo de uso

Segundo. Desconexiones obligatorias (dinámicas familiares).

Tercero y cuarto. Hay que diversificar y explorar.

Quinto y sexto. Compartir experiencias y conversar sobre los intereses.

Séptimo. Salud física.

Octavo. Ser un buen ejemplo.

Noveno. Medir el uso.

Décimo. Reflexionar sobre cómo se desarrollan las cosas.