El milagro se ha consumado y el Deportivo Alavés vuelve a competir oficialmente

os días siguientes a la Asamblea Extraordinaria del Deportivo Alavés del 18 de agosto de 1986, en la que se ha aprobado el Convenio de colaboración con el Athletic, son frenéticos y trepidantes para todos los 'actores' que tienen -unos- que interpretar sus complicados papeles en esta obra y -otros- hacer mutis por el foro.

La Liga en Tercera División va a comenzar el domingo 31 de agosto y apenas hay futbolistas en la plantilla y tampoco hay entrenador oficial. Alberto Lasaga -director del fútbol base albiazul- ha dirigido y realizado una serie de entrenamientos y partidos amistosos con algunos futbolistas, que serán la base del Deportivo Alavés para la campaña 1986-87. ¡No hay tiempo que perder!

En los despachos los rectores también luchan contra el reloj, para que la figura de Juan Arregui -presidente interino- sea reconocida por la Federación Española y pueda nombrarse una Junta Gestora que se haga cargo del club, hasta que se celebren nuevas elecciones. Se han hecho las cosas tan mal a todos los niveles, que hasta para comenzar a caminar de manera legal hay problemas. Hay otro presidente interino: Paco Cayón.

El que fuera nombrado vicepresidente por el dimitido presidente Ortiz Gil, tiene la llave del asunto. Si dimiten él y su grupo, al que acompaña el gerente Valentín Izquierdo, la Federación Guipuzcoana -por vía urgente y de manera inmediata- nombraría una Gestora que presidiría Juan Arregui, que es la única persona con la que los responsables del Athletic quieren firmar el Convenio. ¿Es o no es esto un vodevil? ¿Alguien lo entiende?

Las horas y los días pasan a una velocidad de vértigo en el Deportivo Alavés y el lunes 25 de agosto -quedan seis días para el comienzo del campeonato- Paco Cayón se reúne con Juan Arregui y se echa a un lado. Se mantiene una nueva reunión con el Athletic en Bilbao, en la que se fijan las normas por las que el club de Mendizorroza pasa a ser un club convenido. ¡Comienza a divisarse la luz al final del túnel! ¡Bendito lunes!

Es tanta la premura y la urgencia en la que vive el ente albiazul, que se solicita el aplazamiento del primer partido de Liga que se tiene que jugar en Mendizorroza frente al Club Portugalete. La Federación Española deniega la petición del Deportivo Alavés.

En lo deportivo el miércoles 27 de agosto, tras tantear otros nombres, se ficha como entrenador al gernikarra Alberto Uriona, ex jugador albiazul en la temporada 1960-61. "Hay que recuperar el tiempo perdido", son las primeras palabras del de Gernika.

A velocidad de vértigo se va cerrando la plantilla -en el transcurso de la temporada irán llegando más futbolistas-, en la que destacan jugadores históricos que han defendido la camiseta del Deportivo Alavés en Segunda 'A': Larrañaga, Higinio, Astarbe, Galarraga y Raúl Urbina y jóvenes promesas: Alberto Roth, Carlos Martínez o Eduardo Estibariz.

El 31 de agosto de 1986 Mendizorroza abre sus puertas en partido oficial, en este caso de Tercera, y algo más de 2.500 aficionados acuden a la llamada de auxilio de Juan Arregui.

Sin apenas entrenamientos a las órdenes de Uriona, sin conjunción ni ensamblaje, el equipo tira de casta, lucha, pundonor y vergüenza torera, que le sirven para rescatar un punto frente a los portugalujos (1-1). Pasada la media hora de partido el 'jarrero' Néstor González Miguel, adelanta en el marcador al Deportivo Alavés, ante el delirio de todos los albiazules. ¡El camino va a ser duro, difícil y complicado, pero vivimos!

Alberto Uriona alineó frente al Club Portugalete a los siguientes futbolistas albiazules: Azkune; Alberto Roth, Larrañaga, Carmelo (Higinio, 64'), 'Javi' Muro; Eduardo Estibariz, Astarbe, Carlos Martínez; Lucas, Diego (Francisco, 68') y Néstor.

Tras los treinta y ocho partidos ligueros, el Deportivo Alavés quedó clasificado en la séptima posición (47 puntos), a uno solo del tercer clasificado, Lemona (48), que ascendió a Segunda 'B' junto a Cultural de Durango (51) y Basconia (50).

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