El 'Miniglorias' se queda con la miel en los labios
Los babazorros se adelantan por medio de Mañas en el descuento, pero el Real Unión empata poco después
El Alavés B sumó un punto en casa ante el Real Unión, que llegaba a Ibaia en un excelente momento tras sumar diez de los últimos doce puntos. El reparto de puntos final no pudo sorprender a nadie que presenciara el partido, igualado y disputado en todo momento, pero sí en la forma como se produjo. El cronómetro llegó al minuto 90 sin goles en el marcador, pero el tiempo de añadido resultó una locura en la que hubo tiempo para que el Miniglorias divisara la victoria tras marcar Aitor Mañas y los irundarras lo frustraran al empatar por medio de un penalti transformado por Santi Miguélez.
Hasta llegarse a ese vertiginoso desenlace se vivió un partido muy táctico, con muchas precauciones por parte de ambos equipos, que en muchas fases priorizaron más no perder que tratar de ganar. Todo ello derivó en un duelo con pocas ocasiones de gol, si bien fueron los de Ramsés Gil los que tuvieron las dos más claras, con sendos remates que repelieron los postes de la portería de Grego Swiderski.
El obligado cambio que tuvo que hacer el Real Unión a la media hora de juego por lesión de Manu Molina no varió el guion del primer tiempo, en el que fueron los guipuzcoanos los que llevaron la iniciativa pero sin traducción en forma de peligro ante el buen trabajo del filial albiazul, ordenado y solidario en todas las líneas.
Ya en el segundo tiempo, el paso de los minutos y la consiguiente aparición de la fatiga física empezó a abrir algo más un partido hasta entonces muy cerrado. Molo Casas agitó el árbol con la entrada primero de Izei Hernández y más tarde de Aitor Mañas y Chema Aragüés, a los que ya dentro del último cuarto de hora se añadieron Álvaro y Pablo Goitia. Pero también el técnico visitante fue relevando piezas en su equipo y el duelo siguió sin moverse de la suma cero. En una y otra parcela, todo lo que unos intentaban, los otros lo neutralizaban.
EPÍLOGO DE LOCURA
El empate sin goles parecía cantado cuando los primeros espectadores empezaron a desfilar de la Ciudad Deportiva José Luis Compañón. Hicieron mal de marcharse antes del pitido final, pues se perdieron todo lo que deparó el tiempo de añadido. En el segundo minuto del alargue un ataque alavesista derivó en un balón suelto en la frontal del área, Aitor Mañas no se lo pensó dos veces y con mucha calidad conectó un disparo colocado que mandó el balón a la red.
Parecía el tanto de la victoria del Miniglorias, pero el enrevesado guion del final del partido todavía guardaba un último giro en sentido inverso. Se fueron arriba los irundarras buscando el empate a la desesperada y forzaron un derribo en el área que el colegiado castigó como penalti. Santi Miguélez no falló desde los once metros y selló unas tablas anunciadas durante todo el duelo, pero que por su forma final acabaron dejando un sabor agridulce en el seno del filial alavesista.
Aun sabiendo a poco, cabe darle valor al punto sumado por el Alavés B ante un Real Unión en puestos de playoff de descenso, de los que no está lejos un Miniglorias que, tras dos empates consecutivos, la próxima semana tratará de regresar a la senda de la victoria en su visita al Ebro de Zaragoza.