La Real no puede esperar mucho más para fichar a un centrocampista y como reconoció Jokin Aperribay en sus comparecencias en Japón, tienen varias vías abiertas en el caso de que finalmente no se concrete la incorporación de Equi Fernández. Uno de los mejor colocados es Antonio Blanco, el medio centro del Alavés.

En principio le han dicho que si no se cierra el argentino esté preparado porque es bastante probable que llamen a Josean Querejeta para negociar otro traspaso como sucedió el verano pasado con Javi López.

El tema Equi cada vez tiene peor pinta. Desde el club realista reconocen que es su prioridad y que iban a apurar hasta el final, pero se han encontrado con muchas piedras en el camino como lo complicado que ha sido negociar con el club saudí, con el que han tenido muchos problemas para comunicarse, y su alto precio que nunca han visto con claridad querer afrontar semejante desembolso. Según fuentes cercanas a la entidad árabe, a día de hoy, con objetivos deportivos, la operación podría llegar hasta casi los 30 millones.

Eso sí, si se cumplen es porque las cosas funcionan, obviamente. Parece muy complicado que esta Real, que por ahora ha cerrado solo una cesión con opción de compra con el central croata Caleta-Car y que negocia otras operaciones a préstamo como la de Gonzalo Guedes, eleve su listón hasta esas cantidades que le convertirían, de largo, en la contratación más cara de la historia txuri-urdin.

Eso sí, el interés en el ex de Boca viene de lejos y en un primer momento la operación se dio por hecha por parte de los saudíes, que en principio accedían a la petición de salida del futbolista, que se va a llevar un buen disgusto si se descarta su fichaje. Luego no entendieron los motivos por los que la Real dejó la comunicación, aunque en Anoeta vendan que la responsabilidad no fue precisamente suya. Un clásico teje y maneje que, hasta la semana pasada, daba la sensación que iba a tener un final feliz y que cada vez se encuentra más lejos de sellarse con el esperado fichaje. Será una auténtica pena. 

Antonio Blanco

La dirección deportiva maneja otros nombres y uno de los mejores colocados es Antonio Blanco, que vuelve a estar cotizado tras el fuerte interés de la Fiorentina durante el pasado verano. Nacido hace 25 años en Montalbán de Córdoba, se formó en La Fábrica y llegó a debutar con el Madrid, con el que jugó varios partidos y ha sido internacional. Después salió cedido al Cádiz, pero la cosa no iba a bien y acabó en el Alavés donde fue clave para lograr el ascenso.

El club babazorro abonó cuatro millones para hacerse con tan solo el 50% de sus derechos. Tiene contrato hasta 2027 y, lógicamente, saldría mucho más barato que Equi Fernández (unos 10 millones), aunque no se les pueda comparar en lo deportivo, ya que la proyección del segundo a pesar de estar en la liga de Arabia se encuentra a otro nivel.

En principio su perfil es más defensivo que el del argentino y suele actuar más de 4 que de volante (Equi también se ha pasado jugando toda la temporada pasada en esa demarcación que aquí perece estar destinada a Gorrotxategi, a pesar de ser compatibles).

Las relaciones entre la Real y el Alavés son excelentes, pero el club de Mendizorroza no dará facilidades en el hipotético caso de que se active la operación, sobre todo teniendo en cuenta que la mitad del traspaso irá a parar a las arcas del Real Madrid. No es el único nombre de la lista de jugadores para reforzar la sala de máquinas, en la búsqueda de energía y concentración sobre todo tras pérdida que busca Sergio Francisco. 

No hay que olvidar que el técnico considera vital dar en la diana con ese fichaje, aunque, el que le gusta mucho es Equi Fernández cuya llegada esperaba con expectación en las anteriores semanas. Veremos cómo se desarrollan los siguientes acontecimientos y si finalmente se cierra la carpeta del argentino…