Eduardo Coudet acabó doblemente satisfecho por el triunfo del Alavés. Primero porque dio con la tecla con los cambios y segundo porque el gol de Tenaglia llegó a balón parado.

“Necesitábamos un poco más de los que ingresan y hoy todos los que salieron lo hicieron bien. Teníamos que llevar a otro nivel el partido, algo que no estaba sucediendo. El balón parado era fundamental porque el partido fue trabado, los dos equipos querían cortar las líneas y había poco espacio para jugar. No hemos permitido a la Real generar circuitos ofensivos y con muchos futbolistas de buen pie”, alabó.

El despliegue físico fue muy generoso por parte de sus pupilos y eso no lo pasó por alto.

“El 1-0 me gustaba, pero otro gol hubiese dado más tranquilidad. Lo importante es que el equipo estuvo a gran nivel los 96 minutos y son tres puntos vitales en esta etapa del torneo. La tensión aún no nos permite estar tan finos en algunas situaciones, pero hemos corrido muchísimo y se ha visto un equipo intenso que intentó generar en todo momento”, destacó el técnico argentino, quien lamentó que “en el inicio tuvimos una marcha menos”, pero los cambios en el descanso permitieron “achicar más los espacios y estar más juntos para ganar las segundas pelotas”.

A juicio de Coudet, tras las duras derrotas de este curso en Mendizorroza, “ganar en casa te libera y teníamos esa deuda con la gente y nosotros mismos”. “Futbolísticamente hicimos muchas cosas buenas para no estar en esta situación, hemos pagado muchísimo cada error. Fuimos serios, compactos”, añadió el técnico del Alavés, quien aclaró que Carles Aleñá “viene jugando con molestias, tuvo una rotura y hay que cuidarlo para que llegue al próximo partido al cien por cien”.

Tras recordar que “vamos a necesitar a todos”, Coudet dijo que “no hay que dejar de trabajar” en pos del objetivo final y también elogió el apoyo de la afición. “El cálculo ideal es prepararse para ganar el próximo partido. Es difícil hacer cálculos en esta liga, no me animo a ello”, concluyó un Coudet “aliviado” tras el tanto anulado a Oskarsson en el minuto 89. “No hubiéramos merecido el empate. No nos tiraron a puerta y fuimos sólidos”.