Finalizado el parón internacional, el Deportivo Alavés vuelve a la acción dispuesto a dar continuidad a todo lo que había hecho bien antes de este impás. Su reacción en las últimas jornadas, aun pudiendo cosechar mejores resultados, le permitió abandonar los temidos puestos de descenso y, para mantenerse fuera de ellos, necesita derrotar esta tarde (18.30 horas) al Rayo Vallecano, que visita Mendizorroza para la jornada 29.

Superar a los madrileños haría bueno el punto en Gran Canaria. Allí, los albiazules tuvieron en su mano una victoria importantísima; pero, después de hacer lo más difícil, se vinieron abajo y terminaron firmando un insuficiente empate. Algo que, como han dicho varios jugadores desde entonces, no puede repetirse. Y mucho menos en el Paseo de Cervantes. Es necesario mantener la concentración hasta que el árbitro pite el final.

A favor del Alavés juega que su última actuación en Mendizorroza supuso un evidente punto de inflexión. Más allá del resultado, lo determinante del triunfo contra el Villarreal fue la manera en la que se produjo. Las gradas, ardientes por la doble expulsión, llevaron en volandas al equipo y la conquista dejó varias instantáneas para el recuerdo. Ese día debe servir para hacer del estadio babazorro un fortín en este epílogo del curso.

Aunque el Glorioso está dando la cara lejos del Paseo de Cervantes, nadie duda de que la permanencia va a pasar por lo que ocurra en Vitoria-Gasteiz. Seis de las diez citas restantes se jugarán aquí –tras el Rayo les tocará al Real Madrid, Real Sociedad, Atlético, Valencia y Osasuna– y no hay excusa posible para que se repitan debacles anteriores, como las sufridas frente al Espanyol, Getafe o Girona. Así lo piensa también la plantilla.

TODA LA PLANTILLA DISPONIBLE

Respecto a la convocatoria alavesista, la gran novedad es que, por primera vez desde que tomó las riendas, el Chacho tendrá ante el Rayo a toda la plantilla disponible. Antonio Sivera, Tomás Conechny, Toni Martínez y Kike García ya se han recuperado de sus respectivas dolencias, nadie se ha lesionado durante estas dos semanas y tampoco hay bajas por sanción, aunque sí varios apercibidos de cara a próximos compromisos.

Cambios en el once titular, como siempre, se esperan pocos. Más allá del regreso de Sivera a la portería, confirmado por el propio técnico, y la más que probable entrada de Antonio Blanco en la medular y Kike García en delantera, sería extraño ver más variaciones respecto a los que salieron de inicio ante Las Palmas. Una alternativa, pese a no haber funcionado en exceso hasta ahora, sería recuperar el dibujo de dos puntas.

El Rayo, por su parte, visita Mendizorroza en mitad de una mala racha, pero con el margen de puntos suficiente como para estar tranquilo y no preocuparse por los puestos de descenso. Los vallecanos están siendo una de las revelaciones de la temporada y, aun habiendo perdido tres de sus últimos cinco partidos -los otros dos fueron tablas-, ocupan la novena posición de la tabla, manteniéndose más cerca de Europa que del 18º.

Íñigo Pérez, al contrario que Coudet, sí que echará de menos a más de un jugador en su expedición al Paseo de Cervantes. Con Mumir lesionado y Lejeune cumpliendo ciclo de tarjetas, el entrenador navarro no tiene otro central natural para acompañar a Aridane, salvo que opte por Pelayo Fernández, quien no ha debutado esta campaña. Lo lógico es que aproveche la polivalencia de los mediocentros Valentín o Ciss. Tampoco estará Camello.