La rapidez con la que Carlos Vicente se ha adaptado a la Primera División no se ve todos los días –y mucho menos entre aquellos jugadores que, en menos de un año, han saltado dos categorías–. Desde que fichó por el Deportivo Alavés el pasado mes de enero, el extremo maño ha sido uno más para Luis García Plaza, quien no ha dudado en alinearle de inicio en varias ocasiones, y ha demostrado sobre el césped que, cuando se tienen cualidades y ganas de trabajarlas, el hecho de no haber tenido casi experiencia en el fútbol profesional no es una desventaja. Apreciadas sus actuaciones, no sorprende que la secretaría técnica liderada por Sergio Fernández apostara por él con tanto ahínco.
Ya era virtual, pero ¿qué ha significado para el equipo certificar la permanencia?
Lo ha sido todo, pues al final es lo que buscas en una temporada. Es el objetivo que te hace entrenar al máximo cada día para ganar partidos y sumar puntos. Significa mucho tanto para el equipo, por cómo se ha dado y por la piña que somos, como para la afición, que va a poder seguir disfrutando del Alavés en la élite.
Qué manera de hacerlo, además. Tres victorias consecutivas y la decisiva en un campo muy complicado como Mestalla.
Ha sido increíble, está claro. Creo, además, que hemos sabido aprovechar las rachas buenas y levantarnos cuando han llegado las malas, lo que me parece fundamental. También hay que darle valor a que toda la plantilla ha sido importante, como ha demostrado el rendimiento del equipo en el momento que ha habido rotaciones.
“El Alavés ha sabido darme todo lo que necesitaba y buscaba para dar el salto a Primera División”
Visto lo visto, parece que se les va a quedar corta la temporada.
(Ríe). Eso parece, sí. Estamos en un momento de forma excelente, con todos los jugadores muy enchufados, y mucho mérito de ello es del cuerpo técnico, que ha hecho un gran trabajo en la gestión del vestuario. También te digo, creo que es momento de descansar y valorar lo que hemos hecho, aunque estemos disfrutando.
¿Cuáles entiende que han sido las claves que han hecho posible este objetivo?
La familia que hemos formado, esta como principal. Se suele tirar de tópico, pero en este caso es completamente cierto y es algo que los jugadores lo valoramos muchísimo. Creo que todos hemos tenido convivencias más complicadas en el pasado y aquí ha sido lo contrario. Yo soy un buen ejemplo, llegué un poco más tarde y la adaptación ha sido increíble gracias a ellos.
¿Ha habido algún momento realmente complicado?
Esa última racha que tuvimos de tres derrotas consecutivas fue difícil gestionarla, más aún viendo que el descenso nos iba recortando puntos, pero ahí es donde mejor se ha visto la fortaleza del equipo. Es un lujo poder decir que nos hemos salvado a falta de cuatro jornadas.
"CON TRABAJO Y AMBICIÓN, ESTO SOLO PUEDE IR A MEJOR"
A nivel personal, ¿qué valoración hace de estos primeros cuatro meses en el Alavés?
Inmejorables, tanto para lo bueno como para lo malo. He tenido la suerte de participar mucho, lo que me ha servido para adaptarme a este nivel, y también estoy aprendiendo a gestionar los momentos malos. Antes ya lo hacía, pero no es lo mismo superar un bache en Segunda o Primera RFEF que en LaLiga. No cambiaría absolutamente nada de lo que he vivido hasta ahora como albiazul.
¿En qué aspectos ha notado más el salto de categoría?
Tanto a nivel físico como de calidad hay un puntito más y luego, obviamente, te enfrentas a clubes con un nivel increíble, como pueden ser el Barcelona, Real Madrid, etc. Ahora bien, uno se adapta rápido a lo bueno.
“Mi adaptación al vestuario ha sido muy sencilla desde el primer día; ya me avisaron de que el grupo era genial”
Se nota, esto último, cuando le vemos correr por la banda o centrar sin complejo alguno.
Claro. Tengo claras cuáles son mis fortalezas y debilidades, también lo que quieren el club y el míster de mí, e intento sacar el mayor provecho posible de todo ello. Es evidente que me han salido partidos mejores y peores, pero no tengo ninguna queja. Creo que me he adaptado bien.
Conociéndose a sí mismo, ¿se ve con mucho margen de mejora?
Siempre he sido muy ambicioso, si te soy sincero. Esa es la suerte de haber pasado por tantas categorías, aunque ahora se haya acelerado mi carrera, y lo que me hace no ponerme techo. Con trabajo y confianza, esto solo puede ir a mejor, y ojalá sea estando en el Alavés muchos años.
¿Ha cumplido el Glorioso con todas las expectativas que tenía cuando firmó?
Sí, sí. Las expectativas se han cumplido e, incluso, sobrepasado. A la hora de dar el salto a Primera uno tiene dudas, pues no sabe cómo va a ser el día a día o si se va a adaptar bien, y el Alavés ha sabido darme todo lo que necesitaba y buscaba. No puedo estar más agradecido, porque estos cuatro meses y medio han sido increíbles.
¿Qué ha sentido al jugar en Mendizorroza?
Es una pasada. Me he sentido muy arropado, porque el estadio casi siempre está lleno y la gente no para de animar, y esto es algo que valoro muchísimo. Ese aliento de la afición es el que me permite pelear una jugada más, aun cuando ya estoy agotado, o el que me provoca un nudo de emoción antes de saltar al césped.
Imagino, entonces, que tiene ganas de celebrar con la afición su primer gol como babazorro.
Muchas, muchas. Lo más importante es ganar, pero sí es cierto que tengo ganas de marcar y celebrarlo en Mendi. Soy paciente con eso, también te digo. Hay momentos y etapas para todo, lo importante es aportar al grupo.
“Siempre he sido muy ambicioso, por eso no me pongo techo; con trabajo, solo puedo ir a mejor”
¿Cómo ha sido su adaptación al vestuario babazorro?
Muy sencilla, desde el primer día. Ya me avisaron que el grupo era magnífico y no ha habido ningún problema. Pese a ser un equipo joven, que supuestamente es más difícil de gestionar, somos una familia y queremos que siga siendo así.
¿Están tan ‘locos de la cabeza’ –expresión popularizada en redes– como parece en los vídeos?
(Ríe). Siempre hay que estar un poco loco para jugar al fútbol. Y sí, somos unos ‘locos de la cabeza’ a los que nos gusta competir juntos.
¿Quién es el que más sencilla le hace la convivencia?
Siempre hay compañeros con los que te relacionas más, como son Owono, Sivera, Abde en mi caso; pero, en general, todos han puesto su granito de arena para facilitarme las cosas.
Y la competencia, ¿qué tal? Ha tenido a Sola, Rioja, Gorosabel…
Aparte de que, bajo mi punto de vista, la buena competencia es lo mejor que le puede pasar a un equipo, pues si te aprietan es más fácil dar lo mejor de uno mismo, creo también que ha sido muy llevadera. Ver cómo nos alegramos Sola y yo de lo bueno que le pasa al otro es buena muestra de ello.
"A TODOS NOS PREOCUPA UN POCO QUE LUIS NO HAYA RENOVADO AÚN"
¿Considera que hay buenos cimientos para crecer durante los próximos años?
Por supuesto. El club está bien encaminado y tiene muy claro lo que debe hacer para conseguir sus objetivos, empezando por mantenerse mucho tiempo en Primera para luego ir aspirando a más cosas. Creo que se están dando los pasos correctos en ese sentido.
¿Debe seguir siendo Luis García Plaza quien lidere ese proyecto?
Ojalá, la verdad. Desde que he llegado me ha tratado muy bien, ha sido quien me ha dado la oportunidad de debutar en Primera División y tengo una gran relación con él, como el resto de compañeros. También ha sido una parte vital de esta permanencia.
¿Qué parte de culpa tiene el madrileño de que la atmósfera del vestuario sea tan buena?
Bueno, los entrenadores, quieras o no, también se encargan de gestionar, y él sabe cómo hacerlo para que el ambiente sea el idóneo y no haya conflictos. Es cierto que la intención debe salir del grupo, pero su figura es clave.
¿Le preocupa que aún no haya renovado?
A todos nos preocupa un poco. Espero que continúe, pero esto es fútbol y sabemos de sobra cómo es.
