Mendizorroza albergará, en poco más de un mes, partidos de primer nivel ante los colosos del fútbol estatal. El Deportivo Alavés, que presentó hace dos días la campaña de abonados bajo el lema ‘Próxima parada: Primera División”, quiere mantener a su masa social y, también, sumar nuevos adeptos a las gradas del Paseo de Cervantes.
Para ello, desde el club se ha optado por establecer unos precios de carnet que son los mismos que los de la temporada 2021-22, la última del Glorioso en la máxima categoría. Una medida que, por lo general, satisface los intereses de la parroquia albiazul.
Este es el caso de jóvenes como Oier Peña, Unai Lafuente y Enaitz Carrero, quienes, ayer, en plena mañana, hicieron fila para prolongar su fidelidad con el Alavés. “He sido socio siempre en Segunda, nunca me lo he podido permitir en Primera, pero este año he conseguido ahorrar dinero para el carnet”, declara Peña. Carrero, por su parte, ansía ver al Glorioso luchando con los equipos más poderosos de LaLiga. “Me hice socio el año pasado al bajar a Segunda porque en temporadas anteriores no tenía mucho dinero para poder hacerme abonado”, recuerda. “He estado ahorrando bastante tiempo, así que seguiré en Primera”, añade.
Los tres jóvenes quieren sentarse juntos en Mendizorroza. Algo que en el pasado curso no pudieron lograr, pero que tratarán de conseguir en esta temporada. El aumento de precios, en la opinión de estos tres jóvenes, es una medida coherente. “Es normal que suban los precios, al estar en Primera los partidos son contra equipos más grandes”, considera Peña. “Nos gustaría entrar en Arabako Garrasia, pero está difícil. Ojalá que podamos entrar algún año”, reconoce La Fuente, uno de los tres alavesistas, que son el presente y futuro de un sentimiento que vive en la actualidad su momento más álgido.
Los veteranos, satisfechos
Una pasión que, precisamente, Luismi Elbira respira desde que tiene uso de razón. El coleccionista de camisetas del Glorioso considera que los precios facilitan la renovación de abonos y las nuevas altas, pero echa en falta facilidades para los más jóvenes. “No me parece mal el aumento de precios, se ha subido en absolutamente todo por la inflación y se mantiene el mismo precio que el de la última temporada en Primera. Estamos en la máxima categoría, en otros clubes los precios son similares e incluso el del Alavés es un poco más barato”, argumenta.
Sin embargo, Elbira incide en que se podía haber aprovechado el tirón entre la nueva hornada de alavesistas para teñir, por completo, las gradas de Mendizorroza. “Sí que echo un poco de menos que hayan sacado un carnet especial para atrapar a la chavalería. Esos son el futuro y son los que pueden dar la ampliación de Mendizorroza. Hay una cantera terrible que va por la calle con camisetas del Alavés, algo que en mi época no se veía. Si haces un carnet asequible, a ese grupo de personas le vas a enganchar”, recuerda.
Otro de los aspectos más reseñables se encuentra en la categoría sub 25. Un rango de edad que abarca a jóvenes nacidos desde el 1998 hasta el 2008. “Un chaval de 24 años puede sacar algún trabajo y se puede financiar el carnet, pero para otro crío de 15 años es complicado pagar el abono. No puedes poner el mismo precio a un joven de 20 años que a un chaval de 15”, considera Elbira.
Cabe recordar que la cifra de abonados del pasado curso fue de 14.270. Un número de socios que aumentará con creces en esta misma temporada dado el ascenso de categoría. Desde el club se fijan el objetivo de alcanzar las 17.000 altas en un corto o medio plazo, un número que ya registró el Alavés durante alguna temporada en la máxima categoría.
Con todo, la pasión por el Glorioso se ha dejado notar desde el primer día de campaña. En poco más de 24 horas, el club vitoriano registró más de 500 nuevas altas para acompañar al conjunto babazorro en Mendizorroza. Ayer, en la tienda del Alavés-Baskonia, se registraron numerosos aficionados que acudieron a las oficinas para renovar su abono o, por lo contrario, comenzar su andadura como socios del Alavés.