El máximo accionista del Deportivo Alavés, Josean Querejeta, bromeó en el discurso de la cena de la celebración del ascenso a Primera cuando le pidieron un reloj Rolex como prima y señaló que "las directivas no lloran, las directivas facturas y por tanto habrá un Casio".
El dirigente guipuzcoano se acordó de todos los estamentos del club y comenzó por los trabajadores a los que dio las gracias.
"Son los que hacen que esto funcione. Siempre son los grandes desconocidos y quería tener un reconocimiento para ellos", expresó.
También se acordó de las familias. "Son las que nos apoyan en todo momento, en todas las situaciones complicadas durante el año", reconoció.
Subrayó el trabajo del presidente, Alfonso Fernández de Troconiz", además de su compromiso y puso en valor la labor del director deportivo, Sergio Fernández, que acaba contrato esta temporada.
Tuvo buenas palabras para Luis García Plaza y su equipo técnico y sobre todo para los jugadores por ser "los actores más importantes de todo esto".
"Ha habido días en los que hemos perdido incluso la fe, pero esto es nuestro club. Un club de sufrir, de caerse y levantarse", admitió.
"Habéis visto lo que supone para esta ciudad estar en Primera División. Esta ciudad tiene un gran compromiso con este club y de alguna forma nos obliga a tener ese compromiso con la ciudad", consideró Josean Querejeta que reconoció que ha sido "un año complicado" y deseo un feliz verano a todos.
