Kepa Arrieta camina hacia su tercer año en la presidencia de la Federación Alavesa de Fútbol con las ganas intactas para seguir mejorando el fútbol local. Desde su despacho del Paseo de Cervantes, el directivo gasteiztarra reflexiona para DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA sobre cómo ha vivido este último año repleto de proyectos.

¿Cuál es su valoración sobre el transcurso del 2022?

–Estoy contento por el trabajo que se está haciendo. Estamos con muchos frentes abiertos como ya sabíamos que sería la dinámica de trabajo en una Federación pero tenemos que estar satisfechos del año porque se han retomado las competiciones sin pandemia después de dos años muy duros. Lógicamente que regresen las competiciones hace que surjan los problemas relacionados con el fútbol, pero hemos recuperado cierta normalidad.

Llegó a la presidencia en plena pandemia, ¿cómo ha sido su evolución desde entonces?

–El covid ha marcado mucho en estos dos años. Fue una locura con protocolos, competiciones que se iniciaban y se tenían que parar. Desde entonces hemos organizado internamente la Federación, que era un paso que debía darse, también hemos desarrollado el Plan Estratégico del 2020-24 y se han priorizado los objetivos fundamentales. Hemos ido dando pasos hacia adelante. Uno de los compromisos era acercarnos a los clubes. Nos trasladan sus preocupaciones y hemos hincado el diente en asuntos importantes como el fútbol femenino, recuperar la apuesta por el fútbol sala y la formación. Están viendo que los resultados son visibles. En fútbol femenino hemos pasado de un 8% de licencias totales al 10%.

La mejora de los campos de fútbol municipales ha sido el asunto más candente de este año, ¿no?

–Es algo que viene desde muy atrás. Hubo un periodo del 2011 al 2018 en el que no se arregló ningún campo. Eso ha provocado que más del 50% de las instalaciones municipales de campo artificial tengan más de 15 años y con un deterioro grandísimo porque hay instalaciones donde el uso es inmenso. Lo primero que hicimos fue realizar un informe de las necesidades a nivel de instalaciones, gradas, vestuarios e iluminación. Hubo un compromiso para realizar inversiones anualmente pero este año las instituciones han incumplido. Lo han reconocido y así nos lo han trasladado. Estamos en un momento de legislatura con infinidad de reuniones y ellos son conscientes de la situación. La renovación tiene que ser a corto plazo y el plan lo tienen en la mesa los distintos departamentos del Ayuntamiento. Queremos un compromiso tanto político como económico de que se harán los cambios.

¿Habrá alguna mejora de los terrenos de juego el año que viene?

–Tengo que ser optimista y espero que en el 2023 veamos frutos de obras en distintos campos y proyectos que se vayan ejecutando. Pero no podemos ir uno a uno porque no llegaremos a cumplir los objetivos. Desde hace más de 15 años hay nueve campos como Adurtzabal, Zaramaga, Aranbizkarra, Betoño y San Martín que necesitan urgentemente ese cambio de instalaciones. Vamos a otras provincias y pasamos una envidia enorme porque vemos que no se dejan más de ocho años de antigüedad. Estamos en temporada y es preocupante el parte de lesiones. Un factor determinante es el estado de los campos. Estamos trabajando para determinarlos pero tiene una incidencia grande y por eso hablamos de mejorar la salud de los jugadores.

¿Considera que el fútbol base de Álava ha evolucionado?

–En el fútbol alavés se está trabajando muy bien en las categorías inferiores en lo que es la base de cadetes y juveniles. Estamos compitiendo con lo que hace años no podíamos pero nos falta ese paso en el fútbol sala y femenino. En juvenil vasca tenemos cuatro equipos que están bien situados en la clasificación y en cadete también tenemos representantes que lo están haciendo bien. Debemos ser conscientes que tenemos menos licencias en comparación con Guipúzcoa y Vizcaya y eso hace que en una Tercera RFEF de 16 equipos la representación alavesa no podamos optar a tener seis equipos pero intentaremos no ser el equipo ascensor. La División de Honor, que era Preferente Alavesa, será reducida a 16 equipos para hacerla más competitiva y que el que ascienda esté más preparado.

¿En qué aspectos se ha enfocado desde que comenzó su etapa?

–Queremos aumentar las licencias de fútbol femenino y recuperar el fútbol sala. El tema de formación era un aspecto relevante y estos años hemos creado una plataforma educativa donde hablamos de reglamento, de nutrición y del desarrollo personal para educar. Dimos un paso enorme en la realización del Congreso de Entrenadores con invitados como el actual seleccionador nacional. Tenemos que estar muy atentos a la nueva Ley del Deporte y todo lo que implique a la formación. Nuestros entrenadores deben tener la titulación. En cuanto a la responsabilidad social corporativa haremos a partir de enero un proyecto de inclusión para personas con diversidad funcional. Esos son los pilares más importantes, además de la propia mejora de nuestras competiciones. El tema de los árbitros también es importante. Con la pandemia perdimos número de licencias y hemos dado ayudas a los clubes para que puedan aportar al colectivo arbitral. Vamos mejorando poco a poco.

¿Cuál es la posición de la Federación con los clubes que firman sus convenios con equipos de otras provincias?

–Ojalá que todos los clubes alaveses estuvieran convenidos con el referente en Álava que es el Alavés. Sé que el Alavés está dando pasos hacia adelante para recuperar el tiempo que se ha perdido en cuanto a clubes que se han ido a otras provincias para hacer sus convenios. Nosotros tenemos que ser muy respetuosos con que cada club decida hacia dónde acercarse. El deseo es que todos nuestros clubes trabajen con el Alavés. Pero soy optimista porque veo al Alavés con un trabajo muy positivo hacia todos los equipos del territorio alavés, sean o no convenidos. Seguramente en breves veremos a alguno de esos clubes incorporarse a la estructura del Alavés, que está mejorando respecto a los últimos años.

Usted no solo es presidente de la Federación Alavesa, también lo es del Comité de Infraestructuras de la RFEF. ¿Qué significa su nombramiento para el fútbol alavés?

–Es positivo que un representante alavés esté en los órganos de gobierno de la Federación Española. Desde la RFEF se me dio la oportunidad de presidir la comisión de Patrimonio y Estructuras y para mí es importante. No solo a nivel de reconocimiento hacia mi persona sino porque el fútbol alavés está representado y tiene decisión en los órganos de la RFEF. La Federación Española está trabajando mucho en el fútbol modesto, genera recursos mayores que hace años y los repercute en el fútbol modesto. Cuando era técnico de Tercera por parte de la Federación Española podíamos recibir una ayuda de 7.000 euros para todo el curso y ahora las ayudas son en torno a 40.000 euros. Es una diferencia abismal.

¿A nivel económico en qué situación queda la FAF?

–La Federación está saneada y genera recursos. En dos años hemos dado en torno a 100.000 euros de ayudas a los clubes en material y es positivo. La gestión económica nos lo permite y lo que generemos queremos que repercuta en nuestros clubes porque ellos son el fútbol alavés.

Una de las mejoras implementadas es precisamente que todos los equipos jueguen con los mismos balones. ¿Fue una idea suya?

–Según llegamos a la presidencia lo quisimos mejorar. No queríamos que en cada instalación deportiva se jugasen los partidos con balones diferentes. Por eso escogimos un balón que además de unir a todos los clubes del territorio nos proporcionase una imagen de marca. Nos supone una inversión importante en el presupuesto y a los equipos les facilitamos el mismo precio que nos cuesta a nosotros. Fue una idea para mejorar la imagen y que todos jugasen con el mismo balón. Reflexionaremos sobre si es el mejor balón pero hay que mantener el equilibrio entre la calidad y el precio. La gente está contenta con él pero si se puede mejorar lo haremos.

¿En qué aspectos tiene puesto el foco de cara al año que viene?

–La mejora de las instalaciones es una de las mayores preocupaciones que tenemos. Otra problemática de la que conviene hablar es el tema de los actos violentos que han ocurrido tanto en Vizcaya como Guipúzcoa y aquí en Álava. Hemos mantenido reuniones con los clubes para reflexionar sobre estas conductas que van en relación con lo que sucede en la sociedad. Hablamos con los clubes para erradicar el tema. En un fin de semana hay 320 partidos en Álava y debemos acotar la cuestión cuanto antes.

¿Se ve mucho tiempo presidiendo la Federación Alavesa?

–Llevamos dos años y medio pero hay que seguir trabajando. El fútbol te dice si sigues o si no. Cuatro años para muchos proyectos se nos queda corto. Seguimos con la ilusión de trabajar y, si el fútbol quiere que sigamos liderando, daremos el paso. La idea es tener una continuidad para llevar a cabo los numerosos proyectos.