El Deportivo Alavés afronta una auténtica final en la pugna por la permanencia. Los pupilos de Mendilibar se enfrentarán al Getafe en el feudo azulón desde las 16.15 horas en un duelo trascendental para recortar puntos con la salvación. De hecho, el de hoy es uno de esos partidos en el que el Glorioso ha de conseguir los tres puntos de cualquier manera, ya que la distancia entre el cuadro madrileño y el gasteiztarra es de seis.
No en vano, esta final en clave albiazul vuelve a ser a domicilio. Una faceta en la que el Alavés no ha logrado causar buenas sensaciones durante este curso. Y es más, el conjunto babazorro, con cinco puntos de 36 posibles, es el peor visitante de toda la categoría junto al Rayo. La condición de visitante es, a todas luces, la asignatura pendiente del conjunto de Mendilibar.
Respecto al conjunto rival, es evidente que el Getafe es otro desde la llegada de Quique Sánchez Flores al banquillo azulón. De 17 encuentros ligueros tan solo ha caído en cuatro y ha logrado otras seis victorias y siete empates. Además, cabe destacar que, bajo las órdenes del exjugador del Valencia, el cuadro azulón tan solo ha perdido un partido en casa, un dato que contrasta con las dificultades que el Glorioso
Las virtudes de este Getafe residen, precisamente, en la fortaleza defensiva mediante una zaga compuesta por cinco defensas. Después, en el centro del campo se encuentran futbolistas de nivel como Maksimovic, Aleñá y Arambarri, a quienes se les han unido en el mercado invernal el talento de otros como Óscar, Gonzalo Villar y Yokuslu. Ya en la zona de tres cuartos, el conjunto madrileño cuenta con un fondo de armario interesante. Y es que tras los titulares Ünal y Mayoral se encuentran Jaime Mata y Sandro.
UNA PARTIDA DE AJEDREZ
Mostradas las cartas del Getafe, queda por descifrar el planteamiento de Mendilibar. Si bien el técnico de Zaldibar comenzó su andadura en Vitoria mostrando fidelidad a su 1-4-4-2, en las últimas dos jornadas ha modificado ese esquema por un 1-4-3-3. Esta apuesta refuerza con creces el centro del campo mediante la presencia de tres hombres como Loum, Escalante y Pina; pero pierde cierta amenaza ofensiva al prescindir de un segundo punta que acompañe a Joselu. De hecho, si la hipotética teoría de la parroquia albiazul era ver a Vallejo y Joselu como la punta de ataque, las apariciones del gaditano han sido desde el extremo izquierdo o sustituyendo al ariete gallego.
Aun y todo, Mendilibar dispone de prácticamente todos sus efectivos para el duelo ante el Getafe. De hecho, Ximo Navarro volvió a sentirse futbolista hace una semana en el Bernabéu y queda por ver si continuará la apuesta por Tenaglia en el carril derecho o si, de lo contrario, el granadino se adueña del puesto.
En definitiva, el Getafe será el encargado de calibrar si el buen hacer del Alavés ante el Valencia se trata de un punto de inflexión o de un mero espejismo. La visita del Glorioso al feudo azulón se convierte en una gesta más que necesaria para los intereses gasteiztarras, y es que el Alavés nunca ha ganado en Primera en el Coliseum. Por tanto, este sábado el conjunto babazorro tiene la oportunidad no solo de dar un golpe sobre la mesa y meterse de lleno en la pelea por su objetivo, sino también de matar varios pájaros de un tiro como romper su mala racha de visitante y, al mismo tiempo, teñir de albiazul las banderas de un feudo que ha sabido detener los ataques vitorianos.