El Deportivo Alavés ha puesto este lunes por la mañana el primer ladrillo de la temporada 2021-22 con los pertinentes reconocimientos médicos en la Plaza Amárica, como hacen cada verano antes de arrancar de manera oficial la pretemporada. Los hombres de Javi Calleja se han reecontrado tras sus vacaciones en la clínica y han podido conocer a algunos de sus nuevos compañeros como los recientemente incorporados Carlos Isaac o Toni Moya. Sin embargo, como suele ser habitual en las últimas temporadas, la plantilla que se ha presentado hoy sufrirá modificaciones hasta el día 1 de septiembre, cuando se de por concluido el plazo para cerrar salidas y fichajes.
Al igual que a lo largo de los próximos dos meses nuevos futbolistas se irán sumando al grupo de Calleja, es posible que algunos de los que se sometan hoy a examen médico no vistan la camiseta albiazul cuando arranque la temporada. Uno de los que mejor cartel tiene y de cuya salida se lleva hablando desde que se inauguró el actual mercado estival es Joselu Mato, que arrancará la pretemporada junto al resto de sus compañeros a las órdenes de Javi Calleja.
A pesar de ello, su continuidad en la disciplina es una incógnita, sobre todo teniendo en cuenta los cantos de sirena que le llegan desde el sur de la península, concretamente desde el Sánchez-Pizjuán. Según publicó ayer el medio andaluz Estadio Deportivo, el Sevilla ha apretado el acelerador en los últimos días en su deseo de contratar al ariete gallego para la próxima temporada.
De hecho, los de Nervión habrían llegado ya a un acuerdo con el futbolista, que estaría presionando al Deportivo Alavés para que facilite su salida a la entidad sevillista. Sin embargo, el conjunto gasteiztarra se remite de momento a la cláusula de rescisión de 20 millones de euros con la que cuenta el delantero, cifra que se antoja difícil que el Sevilla pueda alcanzar, teniendo en cuenta que Joselu tiene 31 años y solo le queda un año de contrato -ampliable, eso sí, hasta el 2023 si juega 25 partidos el próximo año-.
PROFESIONALIDAD POR BANDERA
Pase lo que pase, el Deportivo Alavés puede estar tranquilo, ya que la experiencia de las dos últimas temporadas hace pensar que si Joselu se queda en Vitoria, aunque sea en contra de su voluntad, volverá a ofrecer un buen rendimiento. El delantero gallego ha sido intocable para todos los entrenadores que han pasado por Mendizorroza desde su fichaje en 2019 y siempre lo ha dado todo sobre el terreno de juego. Incluso en los momentos de mayor tensión para el equipo, ha dado la cara y se ha erigido como uno de los líderes sobre el césped, asumiendo responsabilidades y marcando goles importantes. Sería extraño, por lo tanto, que intente forzar su salida ausentándose de los entrenamientos o bajando su intensidad, como otros futbolistas han hecho en el pasado.
Es comprensible que a estas alturas de su carrera y en el gran momento de forma en el que se encuentra el futbolista quiera probar suerte en un equipo de primer nivel como el Sevilla, que la pasada campaña estuvo en la pelea por el título liguero y que el próximo curso participará en la Champions League Además, el conjunto andaluz tiene mayor músculo económico que el Alavés y la capacidad de ofrecer a Joselu un sueldo mayor al que actualmente percibe en Vitoria.
Sin embargo, también es comprensible que el Deportivo Alavés quiera hacer todo lo posible por retener a su máximo referente ofensivo. En las dos últimas temporadas, al club babazorro le ha costado generar oportunidades de gol y Joselu ha sido capaz de transformar esas pocas llegadas en goles fundamentales para mantener al equipo en Primera División. Tener un delantero que asegura más de diez goles por temporada -marcó 11 tantos en la 2019-20 como en la 2020-21- supone un auténtico lujo para un plantel que pelea por salvar la categoría y, en caso de que abandone el club, el Alavés intentará sacar el máximo beneficio por él.
El Sevilla, por su parte, no se caracteriza por ser un club que realice grandes desembolsos. De hecho, su director deportivo Monchi es conocido por encontrar auténticas gangas en el mercado y venderlas después por cantidades importantes. Con Joselu su intención es no superar la barrera de los 10 millones de euros, cifra lejana a los 20 que figuran en su cláusula. Por lo tanto, todo indica que el tira y afloja se mantendrá hasta que una de las dos partes ceda. De momento, el delantero arrancará la temporada como jugador del Alavés.
Al igual que sucedió el pasado curso, el Alavés arrancará la pretemporada con una plantilla diferente a la que tendrá en septiembre
Joselu tiene una cláusula de rescisión de alrededor de 20 millones, cifra a la que de momento el Sevilla no está dispuesto a llegar