- Los pensamientos que se le pasan por la cabeza a la mayoría de aficionados al fútbol cuando ven un delantero de alta estatura suelen ser muy predecibles. Frases como "qué alto, seguro que va bien de cabeza" o "mientras no toque mucho el balón y enchufe las que tenga, nos irá bien" están a la orden del día. No obstante, el fútbol y, sobre todo, los futbolistas han evolucionado mucho en las últimas décadas y, aunque todavía existen muchos jugadores que siguen ese perfil de nueve clásico que tanto se adecúa a los prejuicios previamente comentados, los puntas -altos- actuales tienen muchas otras cualidades más allá de colocarse bien en el área, bajar balones y ser efectivos de cara a portería. Un claro ejemplo -aunque podrían haber sido dos- se lo va a encontrar el Deportivo Alavés en su duelo frente a la Real Sociedad.
Se trata de Alexander Isak. Este jugador sueco de 21 años -y más de 1,90 de altura- llegó al conjunto donostiarra procedente del Borussia de Dortmund en el mercado estival de 2019. En su primera temporada marcó dieciséis tantos -nueve de ellos en liga- y en la actual ya ha igualado su registro en LaLiga Santander. Es rápido, móvil, técnico -y potente- con el balón y sabe aprovechar bien los espacios que generan tanto Mikel Oyarzabal y Portu como Merino y David Silva. Además, sus arrancadas al contraataque también ofrecen opciones diferentes a la parcela ofensiva del equipo.
Estas características, opuestas a las del típico nueve de área, le permiten a Isak tener la polivalencia necesaria para abandonar la punta de ataque en diferentes momentos de cada partido y permitir así que las bandas rompan líneas con facilidad. Su rendimiento, aunque con pequeños bajones -lógicos por su juventud-, ha sido muy positivo durante esta temporada y media en Donosti. Tanto que le valió para quitarle el sitio a Willian José, que acabó dejando la capital guipuzcoana el pasado mes de enero para jugar en el Wolverhampton inglés.
El que no va a poder estar en la cita de esta tarde es un recién llegado que, a pesar de estar completamente descartado por sus problemas musculares, ya ha dejado sus primeros detalles como txuri-urdin y es digno de mención. Carlos Fernández, sevillano de 24 años -y 1,89 de altura- llegó a la escuadra donostiarra como respuesta a la marcha de Willian José, pero no porque sus perfiles fueran similares. Al igual que Isak, Fernández es otro atacante que ocupa la posición más adelantada en la faceta ofensiva, pero que podría jugar perfectamente en la mediapunta. La virtud principal de este jugador es su lectura y entendimiento del juego -solo hay que escucharle hablar en zona mixta- y su capacidad para asociarse con sus compañeros y llegar desde segunda línea. Tras una temporada espectacular en Granada -y no haber tenido opciones con Lopetegui en la primera vuelta-, el canterano sevillista tiene ahora una oportunidad de oro en las filas de la Real Sociedad.
El tercero en discordia -y principal alternativa si Isak acaba recayendo de sus molestias- es el canterano Jon Bautista. El menorquín, que tiene un perfil más rematador, no ha tenido muchas opciones desde la llegada de Imanol Alguacil al banquillo txuri-urdin, pero las ausencias en la delantera podrían brindarle minutos contra el Alavés. Estuvo cedido la pasada temporada en el KAS Eupen belga y pudo volver a salir en el último mercado invernal, pero, finalmente, acabó quedándose en Donosti.
Una de la novedades en la lista de Imanol Alguacil para el derbi frente al Alavés es la del mediocentro vitoriano de 19 años Urko González de Zárate.
A pesar de su novedosa entrada en la convocatoria, el joven gasteiztarra ya debutó con el primer equipo txuri-urdin en la segunda jornada frente al Real Madrid. Desde entonces, ha ocupado un puesto en el banquillo en otras seis ocasiones -una de ellas en Mendizorroza-, pero no ha contado con más minutos en la competición liguera.
Buen humor. La frase célebre de la semana la pronunció el técnico oriotarra, Imanol Alguacil, en respuesta a la pregunta sobre la situación de su equipo tras la dura derrota (0-4) sufrida el pasado jueves frente al Manchester United: "Estoy recibiendo tantos mensajes de ánimo que parece que haya fallecido un familiar. A Mikel Labaka también le están llegando muchos. ¡Pero si perdimos contra el Manchester United! Es cierto que hicimos un mal partido, que ellos fueron mejores y que su entrenador acertó más que yo, pero no nos podemos comparar. ¡Por favor! Somos la Real".