Vitoria - El Deportivo Alavés se encuentra celebrando estos días su 99 cumpleaños y pretende que esa fiesta sea completa con el colofón de una victoria en su duelo ante el Villarreal que le sirva para dar un nuevo paso de gigante hacia su objetivo de la salvación, que le conduciría directamente a festejar su centenario en Primera División. Tras la gran victoria conquistada en el arranque de la segunda vuelta ante el Levante, El Glorioso persigue su segundo triunfo consecutivo, un logro que solo ha conquistado en una ocasión en todo el curso, para encadenar seis puntos enlazados que le permitirían sumar una enorme cuota de tranquilidad de cara al futuro mientras se resuelven las últimas horas de un mercado invernal que se presenta frenético en su cierre.
La irregularidad en los resultados es la que ha condenado al Alavés a verse anclado a la zona baja de la clasificación, aunque sin pisar en ningún momento los puestos rojos. La única serie de dos victorias encadenadas data de los duelos en la primera vuelta contra Valladolid y Eibar, tras conseguirse en el feudo armero el primer triunfo a domicilio del curso. El segundo, y único añadido hasta la fecha en el casillero de visitante, se logró el pasado sábado en Valencia, lo que abre ahora la posibilidad de enlazar seis puntos consecutivos. Cifras mayores cuando se habla de equipos de la zona baja, a los que sumar les cuesta horrores. Por ello, la relevancia de un segundo éxito seguido supondría un golpe sobre la mesa en pos del objetivo de la salvación.
El equipo de Asier Garitano, además de ganar, firmó en el Ciutat de Valencia una de sus actuaciones más convincentes de toda la temporada. La apretura del resultado final esconde una actuación en la que se maniató la peligrosa ofensiva del Levante y se dispuso un juego de ataque dinámico, veloz y capaz de generar un puñado importante de oportunidades de gol. El acierto fue escaso, pero la puntería no es una cuestión tan preocupante como la que arrastraba el equipo en muchas de sus salidas, incapaz siquiera de acercarse a las porterías rivales.
Se cimentó dicho triunfo de nuevo sobre una seguridad defensiva que ha sido el factor clave en las seis victorias cosechadas hasta la fecha. Dejar la portería a cero ha sido cuestión ineludible para ganar, por lo que el objetivo en ese sentido vuelve a ser claro en el duelo de esta tarde contra el Villarreal. Y, después, ampararse en la seguridad alavesista en Mendizorroza, donde en algún momento siempre es capaz de doblegar la resistencia de sus oponentes a base de empuje.
Dibujó hace siete días Garitano un equipo renovado con la presencia de Víctor Camarasa y la idea le funcionó de maravilla con un centro del campo que ganó en dinamismo y calidad con el valenciano. Como los recursos que maneja el técnico de Bergara son escasos, no se pueden esperar novedades reseñables para esta tarde con respecto a ese último partido. La única novedad, y por obligación, debería ser el regreso de Martin Aguirregabiria al lateral derecho para suplir la baja del sancionado Ximo Navarro. El otro ausente de la plantilla es un Lisandro Magallán que lleva días al margen del equipo por culpa de unas molestias que arrastra en la rodilla.
"Los tres puntos contra el Levante fueron muy importantes porque sacar partidos adelante, y más fuera de casa con los problemas que habíamos tenido, cuesta muchísimo. Hemos empezado bien la segunda vuelta y ahora tenemos que mantener en casa la buena línea que estábamos siguiendo. El Villarreal nos va a exigir mucho porque es un equipo que juega muy bien y ha sacado victorias importantes en sus últimos desplazamientos ante rivales muy fuertes. Están muy bien, pero jugamos en casa y tenemos que ser capaces de llevar el partido hacia donde mejor podemos estar y tratar de sacarlo adelante. Contra el Levante hicimos mucha cosas bien, tuvimos nuestras ocasiones y las aprovechamos. Ahora hay que tratar de repetir eso mismo: jugar con intensidad y sin equivocaciones. Hay que dar continuidad a los que hemos hecho en la primera vuelta para tener opciones ante el Villarreal", señaló ayer Asier Garitano.