Vitoria - El Deportivo Alavés Gloriosas necesitaba prácticamente un milagro para recuperar el liderato del Grupo 2 de la Segunda División femenina en la última jornada liguera y esa anomalía no se dio en una matinal de ayer en la que Osasuna cumplió en su duelo contra el Atlético Revellín (0-5) y propició que la amplia victoria albiazul contra el Oiartzun (7-2, con dos goles de Mery y Alexia y uno de Alba, Maia y Urbani) no sirviese para voltear la clasificación, que había quedado ya prácticamente definida en el duelo del anterior fin de semana con las rojillas por delante de las vitorianas. De esta manera, será el equipo navarro el que dispute el play off de ascenso a Primera División, mientras que el Alavés tiene que conformarse con pasar a formar parte de la nueva segunda categoría que se pondrá en marcha la próxima temporada. Pese al amargo sabor de haber perdido en la penúltima jornada ese primer puesto que se había ostentado durante todo el curso, el equipo vitoriano ha conseguido el objetivo que se planteó en el arranque de la campaña de ocupar una de las cuatro primeras posiciones que dar derecho a estar en Primera División B.
La Gloriosas competirán la próxima temporada en esta nueva categoría que se perfiló el pasado verano y que echará a andar con treinta y dos clubes divididos en dos grupos de dieciséis, uno con los equipos del norte y otros con los del sur. Ahí estarán los dos equipos que desciendan de Primera División, los seis que caigan en el play off de ascenso -solo dos subirán a la máxima categoría- y los otros veintitrés que, junto a las albiazules, han copado sus respectivos grupos esta campaña.
Será una competición de mucha mayor exigencia que la que han vivido las vitorianas en la presente campaña, su segunda desde que el Alavés decidiese a apostar por una sección femenina. De la misma manera, los gastos del club en este equipo se incrementarán de manera significativa, ya que hasta la fecha sus encuentros a domicilio se disputaban siempre en provincias limítrofes. A partir de ahora le esperan también rivales gallegos, asturianos, cántabros, aragoneses y catalanes, y habrá que ver cómo se efectúa el reparto de grupos para determinar dónde quedan los madrileños.
En todo caso, un nuevo paso adelante del Alavés en su crecimiento como club, aunque con la sensación de haber perdido una oportunidad de oro de pelear por estar en la máxima categoría cuando ya lo rozaba con los dedos. - DNA