El Deportivo Alavés entrenado por Abelardo Fernández disputará hoy a partir de las 13.00 horas el encuentro correspondiente a la quinta jornada de LaLiga frente a un Rayo Vallecano que espera dejar atrás el inicio atípico que está teniendo fuera de los terrenos de juego. El equipo dirigido por el mítico exjugador rayista Míchel celebraba en junio la vuelta a la máxima categoría del fútbol español, la considerada mejor liga del mundo. Sin embargo, desde que pusieron un pie en Primera se ha hablado más del Rayo Vallecano por lo que sucedía fuera del verde que por lo que los jugadores hacían en el rectángulo de juego. En lo deportivo, la escuadra vallecana no ha hecho un juego muy vistoso pero así y todo está en plena adaptación a LaLiga en su vuelta a la élite. En estos momentos se encuentran en puestos de descenso pero aún es pronto para sacar conclusiones negativas aunque no está de más empezar a ganar, entienden en la entidad rayista. Ayer viernes, víspera de partido, se conoció que la Policía Nacional daba luz verde de manera definitiva a la disputa del partido de hoy en Vallecas. Esta situación se presuponía por ambas entidades aunque hasta ayer no se supo si la disputa del partido finalmente sería oficial o no. En cuanto a lo deportivo, cabe recordar que ambos clubes llevan más de tres lustros, en concreto 16 temporadas, sin disputar un partido entre ambos en Primera División. Este hecho resulta curioso pues al contrario que sucede en otras ocasiones, ningún jugador de la primera plantilla actual del Alavés disputó aquel encuentro. Para ser conscientes del tiempo que ha pasado, basta con recordar que el actual lateral derecho titular del Glorioso, Martin Aguirregabiria, tenía tan solo seis años cuando el Rayo entrenado por Fernando Vázquez empataba a dos en Vallecas contra el Alavés que dirigía Mané. Magno e Iván Alonso por parte del Alavés y Julio Álvarez por el Rayo fueron los autores de los goles.

El partido de hoy se disputará a mediodía y la temperatura rondará los 32º, lo que previsiblemente llevará a los dos equipos a la utilización de los tiempos muertos previstos para hidratarse. De este modo, no son pocas las voces críticas contra este tipo de horarios.

En la otra cara de la moneda, los casi 500 aficionados del Alavés que se desplazaran a Vallecas tendrán la oportunidad de disfrutar de un fin de semana largo en Madrid esperando que el equipo conceda la alegría de conseguir la tercera victoria consecutiva de la temporada.

Llegado el caso, el equipo dirigido por Abelardo conseguiría alcanzar los diez puntos en solo cinco jornadas de liga. Los jugadores y cuerpo técnico han intentado estar un poco al margen de los rumores de partido sí o partido no y estar centrados desde el minuto uno en preparar el partido independientemente de que al final se hubiese decidido no jugar.

El Alavés de esta manera empezaba una semana de entrenamientos, el martes, feliz por la racha conseguida en los dos últimos encuentros a pesar de que el juego no haya sido para nada vistoso. El encuentro contra el Espanyol fue un encuentro en el que gracias al VAR y al tesón de los jugadores sumado a la brillantez de jugadores como Jony consiguió levantarse. El de la semana pasada fue un partido en el que los babazorros consiguieron sacar a pesar de que no hiciesen un buen juego. Nuevamente una jugada de Jony hizo que los gasteiztarras lograran levantar un encuentro que podía haber acabado en tablas y haber hecho que la situación en estos momentos del Alavés sería muy distinta.

En estos momentos los albiazules se encuentran en séptima posición pero son conscientes, como dijo el jueves Burgui, que existe una falta de fluidez en el juego. Reconoció el extremeño que aún les cuesta encadenar pases y jugadas que hagan no solo un juego más bonito sino que den más tranquilidad al equipo.

Los aficionados esperan que hoy sea un partido más tranquilo y que se decida cuanto antes sin que se necesite una jugada individual de Jony para ganar el partido y traer los tres puntos a Vitoria.