vITORIA - Josean Querejeta está muy cerca de dar forma definitiva a una nueva pata sobre la que se sustentarán los dos proyectos deportivos que dirige. Uno de los frentes que el mandatario tenía abiertos, la búsqueda de un nuevo patrocinador para Saski Baskonia y Deportivo Alavés, está ya en su fase final e, incluso, podría adquirir rango oficial en los días que vienen por delante. Tal y como adelantó DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA en su edición del pasado 10 de noviembre, las negociaciones entre el máximo responsable de las dos sociedades anónimas deportivas y la empresa alemana ETL Global estaban bien encaminadas -esa misma semana representantes de la empresa germana estuvieron en Vitoria y asistieron en el palco al duelo de Euroliga con el Fenerbahce- y, a falta de los últimos flecos, las mismas han acabado llegando a buen puerto. Todo ello se traducirá en breve en un acuerdo de patrocinio de duración media que supondrá una inyección económica importante para el club de fútbol y, sobre todo, para el de baloncesto.

En un principio, Baskonia, Alavés y ETL Global unirán sus destinos durante las próximas cuatro temporadas. La empresa alemana, especializada en servicios profesionales de asesoramiento legal, fiscal, laboral, auditoría y consultoría, tomará el relevo que el pasado verano dejó Laboral Kutxa en la entidad del Buesa Arena, mientras que en el caso del club de Mendizorroza será la sustituta de Euskaltel, que desapareció del pecho también con el arranque de la nueva temporada.

El contrato de patrocinio supondrá una considerable inyección económica para los dos clubes, pero la misma será mucho más importante en el caso del Baskonia. El club de baloncesto percibirá una contraprestación económica mayor que el de fútbol por la esponsorización y, además, su dependencia del mismo a la hora de generar ingresos también es más elevada. Y es que, hablando del Glorioso, con los prácticamente cuarenta millones de euros que aseguran las televisiones cualquier cantidad adicional se queda pequeña.

Eso sí, al Alavés no le viene para nada mal un ingreso que llevaba buscado desde que decidió renegociar con Euskaltel el acuerdo de patrocinio que las dos entidades tenían estipulado para la presente campaña. Con el ascenso, el club del Paseo de Cervantes comunicó que el precio del pecho de la camiseta pasaba a tener un valor sustancialmente superior al que venía aportando en Segunda División y Segunda B la empresa telefónica. Al no ser capaz de alcanzar dicha cifra -en torno a un millón de euros-, las partes llegaron a un acuerdo para variar su colaboración y Euskaltel luce esta temporada en la trasera del pantalón.

Desde el arranque del curso, el Alavés ha lucido el pecho de su camiseta impoluto. E, incluso, no tuvo problemas a la hora de ceder gratuitamente dicho espacio a la ONG Save the Children en los partidos contra Barcelona, Deportivo, Valencia y Granada. El objetivo era conseguir un patrocinador que se acercarse a los ingresos que el club pretendía conseguir con la venta de ese hueco publicitario principal, cuestión que se acabará consiguiendo con este acuerdo con ETL Global.

ingreso excepcional El pacto de patrocinio supondrá un reseñable ingreso para el Alavés, pero en el caso del Baskonia la trascendencia del acuerdo es muy superior. El club de fútbol ha presupuestado cincuenta millones de euros de ingresos para el presente ejercicio, así que meter en la caja un millón más no supone una ganancia cuantitativamente reseñable. La entidad de baloncesto, en cambio, ronda los quince millones de presupuesto para el presente curso, por lo que porcentualmente la relevancia del ingreso ya sería muy superior de ser la misma cantidad para ambos clubes. Pero es que, además, dentro del acuerdo se recoge que la cantidad a percibir en las arcas del Buesa Arena será mayor que la que termine en las de Mendizorroza, ya que podría rondar los 1,5 millones de euros.

Sin las premuras económicas de campañas precedentes -lo que le permitió arrancar el curso sin nombre comercial por primera vez en muchísimos años-, Josean Querejeta ha sido paciente a la hora de buscar un nuevo patrocinador y ha mantenido contactos con muchas empresas antes de encontrar a la que ha considerado adecuada. El mandatario tenía claro que no quería vender el nombre del Baskonia -no en vano, el patrocinio en el caso del baloncesto es algo más que manchar la camiseta con una marca comercial- a cualquier precio y por eso ha aguardado hasta conseguir una cantidad que considera adecuada a sus intereses.

Una vez que selle el acuerdo con ETL Global, el club del Buesa Arena incrementará sustancialmente su músculo monetario y ganará un apoyo económico muy importante para los próximos cuatro años.