vitoria - Una elongación muscular le mantiene apartado del césped desde el pasado 26 de septiembre. Desde entonces, se ha perdido los duelos ante el Sevilla, Málaga, Real Sociedad, Real Madrid y Osasuna, aparentemente un asunto menor para un jugador que la pasada campaña se pasó más de medio curso lesionado, unas veces por molestias musculares, como ahora, y otras por problemas en sus delicadas rodillas. Como quiera que aquella temporada en Bilbao resultó nefasta, el jugador entendió necesario cambiar de hábitos para no seguir cosechando los mismos resultados, en este caso, perniciosos para sus intereses. Por eso decidió jugar otro partido, esta vez fuera del terreno de juego, y asimilar que su cuerpo necesitaba algo específico para reconvertirse en un jugador regular y estable. Y en ese escenario es donde entraron tres de las personas que conforman su núcleo duro: Endika Monreal, preparador físico y nutricionista; José Vilariño, fisio; y Sergio Bilbao, osteópata. “Me están cuidando y ayudando a no notar molestias. No se trata de perder peso o ganar masa muscular sino de que hay que tener un depósito lleno para hacer un viaje largo o jugar un partido y entrenar”, reconocía el propio jugador hace unas semanas al diario deportivo Marca. De este modo, Ibai se alimenta con los nutrientes necesarios en función de la tarea que toque, se pone dos veces por semana en las manos del fisio que lo relaja y regula el cuerpo gracias al tratamiento de su osteópata, que esta temporada le ha desarrollado unas plantillas específicas para compensar su cuerpo. Tal es la confianza que el vizcaíno ha depositado en este grupo de colaboradores que a uno de ellos, en concreto a José Vilariño, se lo llevó el pasado de vacaciones junto a su mujer a Las Palmas. “Todavía queda por alcanzar mi mejor versión, es una cuestión más a largo plazo pero lo estoy seguro que lo voy a conseguir”, vaticina el jugador.
“debemos ser inteligentes” Ya en modo competitivo, y con el próximo partido de Liga ante el Espanyol en el horizonte, Ibai pidió ayer “inteligencia” a sus compañeros porque el duelo ante los pericos va a ser “complicado”. “La base de este equipo está siendo la ilusión y tenemos que demostrarlo porque estamos en una posición buena en la tabla, somos un equipo incómodo y estamos dando la cara en todos los partidos”, analizó el alavesista. Cuestionado sobre una previsión para el domingo, Ibai advirtió estar seguro de que harán un buen partido ante el Espanyol y que los tres puntos se quedarán en casa”. Eso, a pesar de tener en frente otro equipo igual de incómodo que el Alavés que este verano se ha reforzado muy bien y cuyos jugadores, más pronto que tarde, “deberán dar un paso al frente”. El de Santutxu, que lleva tiempo entrenando con el grupo, indicó asimismo que se encuentra “disponible para el míster y con ganas de sacar los tres puntos” después de los dos pinchazos que han tenido en casa ante el Málaga (1-1) y el Real Madrid (1-4). Por último, respecto a la elongación muscular que le ha mantenido fuera durante un mes, Ibai señaló que está “muy tranquilo”, que el año pasado fue un año “casi entero de lesiones” y que el cuerpo “se está adaptando a entrenar todos los días a tope”. “Que un entrenador hable contigo y confié en ti es muy importante y estoy muy agradecido al “míster” y a todo el cuerpo técnico”, concluyó.