elche - Como no podía ser de otra manera, José Bordalás estaba exultante de felicidad al término de un encuentro que coloca momentáneamente al Alavés en puestos de ascenso y consolida la buena trayectoria albiazul desde el inicio de la temporada. “Nos ha costado muchísimo. Ya sabemos que en Segunda todas las plantillas están muy igualadas y que el que se adelanta primero tiene muchas posibilidades de llevarse el triunfo. Esto nos da confianza y nos permite romper la mala racha de resultados a domicilio. No esperaba tener tantos puntos a estas alturas y lo únicos daños colaterales son las importantes bajas para la próxima jornada”, recalcó el técnico levantino, que no podrá contar el próximo fin de semana ante el Mallorca con Toquero, Carpio y Pau Torres.
En cuanto al éxito en tierras ilicitanas, Bordalás admitió que el equilibrio de fuerzas fue una constante a lo largo de los noventa minutos. “A nivel defensivo hemos estado serios los dos equipos con pocas ocasiones de gol y marcajes muy estrechos. Ha sido un partido de estar juntos y con escasos espacios”, corroboró el preparador albiazul, quien resaltó una vez más las nulas grietas mostradas por sus pupilos en el trabajo de contención. “Hemos estado mejor en la primera parte que en la segunda cuando las fuerzas ya no eran las mismas. No nos han generado grandes ocasiones. Aunque hemos jugado más tiempo en nuestro campo, el equipo ha mantenido el orden hasta que llegó la falta y el gol de Raúl”, analizó Bordalás, sumamente satisfecho por la consecución de tres puntos “ante un gran rival” como el Elche. “Es para estar contentos”, concluyó un entrenador que no ocultó “los buenos recuerdos” que sigue conservando de su etapa en el conjunto franjiverde. - DNA