Vitoria - Tanto José Bordalás como Carlos Terrazas coincidieron en destacar que el encuentro había resultado de enorme atractivo para el espectador pero a buen seguro que ambos lo dijeron con la boca pequeña y si hubieran podido escoger el desarrollo de la contienda habrían optado por uno mucho más cerrado. Así se desprende claramente del análisis del preparador albiazul, que no dudó en reconocer que el principal error cometido por sus discípulos había sido la escasa contundencia mostrada en la retaguardia.
“Ha sido un partido con muchas idas y venidas y eso no nos ha beneficiado. Hemos sido poco sólidos a nivel defensivo, nos han generado demasiadas ocasiones y eso no es normal. Si encajas tres goles resulta muy complicado ganar”, lamentó Bordalás.
El preparador alicantino continuó incidienco en esta misma línea argumental y destacó que “hemos pecado de ser muy ingenuos y demasiado nobles. Para los que dicen que somos un equipo agresivo, nos han sacado solo dos tarjetas y por protestar. No hemos sido capaces ni de hacer las faltas tácticas que por ejemplo ellos sí nos hacían a nosotros para cortar nuestras salidas rápidas”.
Por todo ello, el entrenador albiazul reconoció que resulta obligado “ajustar al equipo a nivel defensivo” aunque significó que “lo intentó todo y dio la cara hasta el final”.