Vitoria. A Natxo González, siempre proclive a buscar el contrapeso en sala de prensa, ayer le costaba dar con argumentos para salirse del discurso generalizado. La contundente goleada que su equipo le endosó al cuarto clasificado del grupo exigía un análisis acorde a la euforia y a la satisfacción con la que los aficionados abandonaron el estadio de Mendizorroza y al final el técnico tuvo que rendirse a la evidencia. A pesar de que reconoció no haber quedado en exceso satisfecho con el desarrollo de la primera mitad, el preparador albiazul concedió que "tras el empate y luego con el 2-1" su equipo "pasó por encima" del Amorebieta para apuntarse un triunfo que por momentos llegó a verse muy complicado en el Paseo de Cervantes. Al final, sin embargo, la excelente reacción de sus pupilos le permitió al Alavés culminar su primera remontada del curso y mantener los seis puntos de ventaja con respecto al segundo clasificado.

"Ha habido goles muy buenos y la verdad es que creo que ha sido un buen partido de fútbol", se mostró dadivoso. "Hemos hecho cuatro goles, hemos encontrado esa finalización que nos estaba faltando. Estamos creciendo en algunos aspectos", prosiguió su análisis un Natxo González que en todo caso acabó por reconocer que el partido se puso más de cara para el Alavés cuando se rompieron los planes iniciales y el juego subió de revoluciones. "En la segunda parte el partido ha entrado en otro ritmo y creo que al Amorebieta le ha pasado factura". "Al equipo le va a venir muy bien la remontada", se felicitó el técnico.

No dudó tampoco Natxo González a la hora de destacar las grandes actuaciones individuales de algunos de sus hombres. Y en este caso, no rehuyó la cuestión cuando se le preguntó acerca de Jonan García. "Queremos recuperar a todos y que todos estén al mejor nivel en este último tramo. Me alegro mucho por él porque ha hecho un gran partido y a nivel emocional eso va a ser importante", remarcó.

Natxo González en todo caso se mostró especialmente satisfecho por la alegría con la que la hinchada albiazul abandonó el estadio. "Hay que dar las gracias a la afición. En unas fechas tan complicadas, ahí están los de siempre como unos campeones", alabó. "Que se tomen un par de cañas porque se lo merecen", zanjó con una sonrisa.