Vitoria. Una semana más, y ya van demasiadas a lo largo de la presente temporada, el Deportivo Alavés deberá reinventarse para afrontar el exigente compromiso del sábado contra el Eibar, en el que se juega eliminar al que hasta la fecha era su gran rival directo en la pelea por el primer puesto, aunque la entrada del Bilbao Athletic en la batalla rebaja la tensión del duelo con los armeros. Y es que, de nuevo, las ausencias de jugadores relevantes se le acumulan a un Natxo González al que le tocará de nuevo romperse la cabeza para componer una alineación equilibrada, una cuestión dificultosa sobre todo en el entramado defensivo.
Las lesiones impedirán, salvo milagrosa, improbable y arriesgada recuperación, jugar a Javi Hernández y Jagoba Beobide. Al central se le diagnosticó una rotura de fibras en el bíceps femoral de su pierna derecha en el partido contra el Teruel y el tiempo de recuperación estimado era de entre dos o tres semanas, espacio completamente insuficiente para una lesión de cierta gravedad y extremadamente peligrosa si no se recupera bien. En el caso del mediocentro, que arrastra problemas desde el día anterior a la disputa del duelo con el Teruel en el que ya se quedó en la grada, las dolencias en la rodilla se recrudecieron en Noja con un esguince del que se evaluará la evolución día a día pero que también le imposibilitará jugar contra el Eibar.
La tercera ausencia relevante en esa zona de contención viene marcada por la expulsión de Manu García en tierras cántabras, en la que supone la segunda roja para el vitoriano en los dos últimos partidos que ha podido jugar. Natxo González había apostado por reubicarle en posiciones centradas, fortaleciendo la zona ancha, por lo que ahí se pierde también el músculo y la potencia de este futbolista.
Estas tres bajas, a las que hay que añadir también la de un Luismi que sigue tratando de recuperarse de las molestias en el gemelo, se compensan en parte por las recuperaciones de Agustín, que se sentó en el banquillo en Noja después de un par de días enfermo, y Jaume, que descanso el domingo al encontrarse sancionado. Habrá que ver cómo resuelve Natxo González la composición de un centro del campo en el que faltarán dos elementos tan importantes como Beobide y Manu García.