Palma de Mallorca. Joaquín Caparrós fue destituido ayer como entrenador del Real Mallorca, justo al día siguiente de la dolorosa derrota encajada por su equipo en San Sebastián ante la Real Sociedad por 3-0, lo que deja al equipo balear penúltimo en la Liga BBVA con apenas 17 puntos.

Lorenzo Serra Ferrer, máximo accionista y director deportivo del Mallorca, anunció en una conferencia de prensa lo que era un secreto a voces desde la primera hora de la mañana cuando se especuló con la marcha del utrerano. Ambas partes han llegado a un acuerdo para la rescisión del contrato de Caparrós, que también compareció ante los medios para expresar la desilusión que siente tras conocer la noticia de su drástica salida.

"Es muy complicado dar esta noticia, pero necesitamos tener un revulsivo para lo que queda de competición y para tratar de asegurar la permanencia", dijo Serra Ferrer a la hora justificar su decisión.

Joaquín Caparrós, por su parte, se limitó a subrayar que se marcha "muy dolido", pero precisó que tanto Serra Ferrer como los jugadores lo han apoyado hasta el final. Tras la derrota del domingo en tierras guipuzcoanas, el Mallorca se queda decimonoveno en la tabla clasificatoria, en puestos de descenso y a cuatro puntos de la salvación. De momento, se barajan los nombres de Gregorio Manzano y Bernd Schuster como posibles recambios, aunque de momento no está definida la identidad del técnico que se sentará en el banquillo de Son Moix durante los próximos meses.

Joaquín Caparrós, destituido ayer como entrenador del Real Mallorca, es el sexto técnico de la Liga BBVA española de fútbol que no concluirá en su cargo la actual temporada.

Hasta ahora los entrenadores destituidos habían sido los argentinos Mauricio Pochettino (RCD Espanyol), Mauricio Pellegrino (Valencia), José Luis Oltra (Deportivo de la Coruña), Miguel González Martín del Campo "Michel" (Sevilla) y, más recientemente, Juan Antonio Albacete Anquela (Granada), relevado éste por Alcaraz.