Vitoria. La cascada de presentaciones de nuevos jugadores del Deportivo Alavés, que se prolongará durante toda la semana, tuvo ayer su segundo episodio con la puesta de largo de Sendoa Aguirre, que ha firmado para las dos próximas temporadas. El extremo izquierdo, procedente del Hércules, con el que jugó 21 partidos la pasada campaña en Primera División, está llamado a ser "el referente del equipo". Así lo definió Dani Barroso, el responsable directo de su fichaje. "Sendoa ha rechazado ofertas de varios clubes de Segunda A, y prácticamente todos los equipos punteros de nuestra categoría querían contar con él, así que es de agradecer que finalmente haya firmado con el Alavés. Nos va a dar muchísimas cosas", manifestó. Barroso, que conoce desde hace "muchos años" a Sendoa, ha sido clave para materializar esta contratación de calidad.

El futbolista tuvo en su presentación un discurso y un talante humilde. "Soy uno más. He jugado en Primera pero también mucho en Segunda y Segunda B", recordó. Evaluó su llegada al Alavés en su carrera como "un paso más". No hacía atrás, simplemente otra etapa que inicia "muy contento" y perfectamente sabedor de que su cartel de "jugador procedente de Primera" tendrá que ser refrendado en el día a día. "Las cosas hay que demostrarlas en el campo. El Alavés ha hecho un gran esfuerzo por mí y se lo quiero devolver en el césped", aseguró Sendoa.

Lo quiera o no,está llamado a convertirse en uno de los líderes del equipo. Su veteranía y experiencia son dos valores que llevan asociado el factor de ejercer como hombre fuerte de la caseta, aunque como nuevo en llegar, mostró su respeto por los compañeros que ya han portado la camiseta albiazul. "Somos los nuevos los que nos tenemos que amoldar y no ir cambiando cosas que han funcionado", aseguró. ¿Líder? "Serán los capitanes los que marquen la pauta a seguir. Aquí hay un bloque de jugadores que el año pasado jugaron el play off y si has llegado hasta ahí es que algo has hecho bien, o muy bien", ensalzó el nuevo jugador del Deportivo Alavés.

Al igual que todos los nuevos, Sendoa Aguirre repitió lo que él mismo ya había manifestado previamente. "La categoría la marca la dimensión del club, no la división en la que juegue. El Alavés está donde está por circunstancias". También se refirió al proyecto, resaltando "la seriedad, la ambición y el reto de devolver al Alavés donde le corresponde" como las razones principales de su decisión.

Nueva Mentalidad Aguirre, de 35 años, mostró en todo momento la madurez necesaria para afrontar una etapa de cambios bruscos. En menos de doce meses, ha pasado de compartir vestuario con un campeón del mundo como David Trezeguet, de ganar por 0-2 en el Camp Nou, y de jugar bajo los focos de la Primera , a un club en plena reconstrucción, sin nombres, que peleará por el reto de salir de las catacumbas de la Segunda B. Sendoa vuelve a este fútbol tras convertirse, con 34 años, en el debutante más longevo de la historia de la máxima categoría. Un premio tardío al esfuerzo de una carrera de casi dos décadas presumiblemente llamada a terminar en Vitoria.