Los problemas de impagos en la Segunda División B no cesan y en las últimas horas han sido los jugadores del Benidorm los que han anunciado movilizaciones después de acumular cuatro meses sin cobrar sus sueldos. Los futbolistas del conjunto levantino han convocado una huelga para la trigésima jornada liguera, en la que el Benidorm recibe al Denia. Si se producen dos incomparecencias, el equipo enrolado en el Grupo III podría correr la misma suerte que el Cerro Reyes, ya descendido.