Tres millones en compensaciones. Esa es la cuantía que recibirán los agricultores alaveses afectados por los daños que ha sufrido el viñedo esta campaña que está a un paso de concluir con la recogida de las bayas. El dinero en cuestión es la contrapartida que recibirán los propietarios de las fincas aseguradas ante los efectos nocivos de la climatología, que han llegado este año en forma de heladas puntuales, fundamentalmente.

Se estiman, además, siniestros superiores los 10 millones de euros en el viñedo de La Rioja (2,9 millones se abonaron ayer). Al ser zonas productoras más tardías, tanto Rioja Alavesa como las dos subzonas vitivinícolas de La Rioja, el pago de indemnizaciones se completará en los próximos días.

En concreto, las compensaciones empezarán a llegar a partir de ahora. De hecho, según ha podido constatar DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA, Agroseguro, que es la agrupación española de entidades aseguradoras de los seguros agrarios combinados, inició ayer el pago de indemnizaciones por los siniestros del viñedo en la campaña 2024.

Este primer abono, de 64 millones de euros para el conjunto del Estado, supone casi el 60% de los daños sufridos por la uva de vino, e incluye a todas las zonas productoras, excepto las más tardías.

A falta de las últimas evaluaciones de daños, la estimación final de indemnizaciones se situaría en los 110 millones de euros en el Estado, correspondientes a 21.000 reclamaciones procedentes de más de 200.000 hectáreas siniestradas, lo que supera las cifras de 2023.

Heladas y granizos

Según fuentes de Agroseguro, la campaña 2024 de uva de vino se ha visto marcada por la incidencia de graves heladas durante abril y mayo. El efecto de las bajas temperaturas en fechas tan tardías causó importantes siniestros, de forma repetida, en amplias zonas vitivinícolas de Castilla y León y del este de Castilla-La Mancha, así como en La Rioja, Navarra, País Vasco, Aragón y Cataluña. En total, los daños se estiman en más 50 millones.

Aparte, durante el verano, las tormentas de pedrisco se dejaron sentir en todas las zonas productoras del centro e interior peninsular, valle del Ebro y área mediterránea. Son responsables, en total, de casi 28 millones en indemnizaciones.

En el viñedo de secano –cultivo que cuenta con opción de aseguramiento frente a los daños por sequía–, la falta de precipitaciones y los golpes de calor incidieron en aquellas áreas que ya registraban déficit de hídrico desde el invierno, especialmente en Cataluña, causando daños por más de otros 20 millones de euros.

Además, como es habitual, también se han recibido siniestros provocados por el resto de los riesgos cubiertos por el seguro agrario, como lluvia, inundación, viento o daños por fauna, así como daños en instalaciones o en plantones.

Por Comunidades

Por comunidades autónomas, ayer se abonaron 20,6 millones a viticultores de Castilla-La Mancha, cuya vendimia está prácticamente terminada. Corresponden a productores asegurados en Albacete (7,9 millones), Ciudad Real (5,8 millones), Cuenca (5,3 millones) y Toledo (1,6 millones). La estimación final total se situará en 25 millones de euros.

Las indemnizaciones en Castilla y León se acercarán a los 30 millones, realizándose ayer el pago de los primeros 13,4 millones –principalmente a productores de Valladolid (10,6 millones) y Segovia (1,9 millones)–, que se completará en los próximos días con el abono de los graves daños por helada registrados en Burgos, que superan los 15 millones de euros. En Cataluña, las indemnizaciones en la actual campaña se situarán en los 19 millones, de los que hoy quedan satisfechos 12,7 millones. Corresponden a viticultores asegurados en Barcelona (6,1 millones), Tarragona (4,8 millones) y Lleida (1,8 millones), así como algún siniestro puntual en Girona.

En el caso de Aragón, las indemnizaciones quedarán abonadas al 90% en este primer pago, con 4 millones para los viticultores de Zaragoza y casi 2,1 millones para asegurados en Huesca. Por último, también se abonan hoy las indemnizaciones al viñedo de la Comunidad Valenciana (3,9 millones, sobre un total estimado que podría acercase a los 6 millones), Navarra (1,6 millones), Extremadura (1,4 millones), Región de Murcia (1 millón), y cantidades menores en Andalucía, Galicia, Madrid e Islas Baleares.