Durante estas semanas, y las venideras, coincidiendo fundamentalmente con los meses de julio y agosto, la red de carreteras de Álava está viviendo un repunte de tráfico, como cada año por estas fechas, con motivo del periodo estival y las consiguientes vacaciones.
El territorio histórico y su entramado viario son un cruce de caminos indispensable en las conexiones entre la meseta castellana y, por ende, con el sur de la península, y Francia. Por ello, son utilizados por centenares de miles de conductores para llegar a sus respectivos destinos de ocio y descanso. Y no todos pasan respetando las normativas de velocidad vigentes en el código de circulación.
Por eso, y para evitar males mayores, ya que el exceso de velocidad está detrás de muchos accidentes, la Ertzaintza y la Policía Local de la capital alavesa van a intensificar los controles habituales. Según la información facilitada por el Departamento vasco de Seguridad, la vigilancia en el marco de esta campaña se llevará a cabo del 15 al 21 de julio, semana clave en las sucesivas operaciones Salida (y también Retorno, para aquellos a los que se les acaban las semanas de descanso, que también son muchos).
Bajo esas perspectivas, la Ertzaintza controlará el cumplimiento de los límites de velocidad, en coordinación con las Policías Locales –en Álava, las de Gasteiz, Llodio y Amurrio–, con el objetivo de reducir la accidentalidad y el número de personas fallecidas y heridas en la red viaria vasca.
Los controles, que serán en todo caso de carácter preventivo, se centrarán en aquellos tramos de riesgo asociado a la velocidad, así como en aquellos puntos donde se circula por encima del límite establecido y existe un elevado índice de siniestralidad. La intención, lógicamente, pasa por contribuir a la reducción de los peligros en la carretera.
Relación directa
Se ha demostrado que la velocidad está directamente relacionada con la lesividad de los accidentes de tráfico. Con velocidades de conducción más altas, el número de siniestros y su gravedad aumentan exponencialmente. Hay que tener en cuenta, además, que a mayor velocidad mayor será la distancia necesaria para detener el vehículo. Se calcula que, por término medio, si se circula a 120 kilómetros por hora hará falta una distancia superior a un campo de fútbol para detenerse.
Estas campañas de velocidad se integran en un calendario de 38 campañas de vigilancia y control de tráfico y transporte, programadas a lo largo de todo el año por parte de los diferentes cuerpos de seguridad con competencias en materia de tráfico.
