Dos de cada diez hogares alaveses dispone de una segunda vivienda en propiedad, según la Encuesta sobre Necesidades y Demanda de Vivienda de 2023 (ENDV) realizada por el Departamento de Planificación Territorial, Vivienda y Transportes del Gobierno Vasco. Así, de las 139.876 unidades familiares existentes, 27.444, un 19,6% tiene al menos dos viviendas, un porcentaje que en Gipuzkoa se eleva al 21,8% y en Bizkaia al 25,4%. En el conjunto de Euskadi, el 23,4% de los hogares vascos (214.808 hogares) disponían en 2023 de al menos otra vivienda en propiedad.

Lo habitual en estos casos es que se disponga de una única segunda vivienda, pero en algunos casos hay más, pues la media de inmuebles disponibles por hogar en el territorio alavés es de 1,11, por los 1,14 registrados en Gipuzkoa y los 1,16 de Bizkaia.

En el caso de las familias alavesas, más de la mitad de sus segundas residencias (15.953, un 52,2%) se ubican en el propio territorio, mientras que otras 904 (3%) están radicadas en Gipuzkoa, otras 1.404 (4,6%) en Bizkaia, y 12.293, un 40,2%, fuera de Euskadi. Por su parte, 205 familias guipuzcoanas y 2842 vizcaínas tienen casa en el territorio alavés.

Un 12% del total

Estas segundas viviendas en Álava, al margen de la procedencia de sus propietarios, se encuentran sobre todo en la comarca de Álava central. Son 15.757, un 11,1% del parque de vivienda de la zona. Le sigue Ayala, con 3.716 viviendas no principales (17,4% del total) y Rioja Alavesa, donde hay 893 segundas residencias, un 9% de todas las viviendas de la cuadrilla.

La media vasca es de un 12,7% de casas no principales, y destacan en ese sentido el caso de Urola Kosta, donde se ubican localidades turísticas como Zarautz, Zumaia y Getaria, con un 22% de su parque de vivienda no principal; y Busturialdea-Artibai, con núcleos como Lekeitio y Ondarroa, donde el estudio constata también la existencia de un 22% de segundas residencias.

Por otro lado, Vitoria-Gasteiz acumula el 62% de las segundas viviendas del territorio, pero estas apenas suponen un 9,4% del parque de vivienda del municipio. Por su parte, Bilbao presenta valores más cercanos a la media de toda la Comunidad Autónoma de Euskadi: las 20.869 viviendas no principales (28,6% del territorio) suponen en 12,6% de su parque municipal de viviendas familiares.

En Donostia es donde se registra la tasa más alta de segundos inmuebles sobre el parque de vivienda total, con 12.587, el 27,6% del conjunto del territorio guipuzcoano, y un 13,3% de las radicadas en la ciudad.

El peso de las capitales

Las áreas funcionales donde se localizan las tres capitales vascas destacan sobre el resto de zonas en cuanto al peso relativo de las viviendas no principales sobre el total de viviendas no principales ubicadas en la comunidad autónoma. Entre las tres ciudades acumulan casi el 68% del total de esta tipología de viviendas.

Fuera de Euskadi

Las 110.217 viviendas no principales en propiedad de los hogares vascos y que se localizan fuera de la CAE, se ubican, fundamentalmente, en las otras comunidades autónomas. El 95,6% de ellas (105.359 viviendas), en concreto, se encuentran en el resto del Estado español. Quedan, por tanto 4.868 viviendas (apenas un 4,4%) que se localizan en el resto del mundo.

Con respecto a esas 105.359 viviendas no principales situadas en las otras comunidades autónomas españolas, Castilla y León destaca sobre el resto de territorios en cuanto al número de viviendas no principales de hogares vascos que acoge. El 29,4% (30.957 viviendas) se encuentran en esa comunidad. Destaca entre las demás la provincia de Burgos con un total de 13.028 viviendas (el 42,1% de las viviendas de la comunidad y el 12,4% del total de viviendas en el resto del Estado español) como la más receptora de este tipo de inmuebles. Cabe destacar que muchos de sus propietarios, aunque viven en Euskadi, tienen raíces familiares en la zona.

En segundo y tercer lugar se posicionan otras dos comunidades limítrofes con Euskadi, como son Cantabria (23.896 viviendas no principales; el 22,7%) y La Rioja (11.278 viviendas; el 10,7%). Estas tres comunidades limítrofes con Euskadi concentran casi el 63% de las viviendas no principales del resto del Estado (66.131 viviendas no principales).

El 20% de las casas no principales se destinan al alquiler

Aunque la mayoría de las familias que adquieren una segunda residencia la dedican a pasar en ellas sus vacaciones, puentes y fines de semana, el porcentaje de estas casas que se dedican al alquiler en el mercado libre es significativo, de un 19,3% (47.803 viviendas). Además, entre las viviendas que se localizan en Euskadi, es el uso más destacado, con un 31% de segundas viviendas (41.969 viviendas) alquiladas.


Por su parte, el 46,5% (114.814 viviendas) del total de las segundas viviendas de familias vascas se destina a uso vacacional; un porcentaje que casi se duplica en el caso de las viviendas ubicadas fuera del territorio vasco: el 85,2% de las viviendas (93.878 viviendas no principales).


La cesión, por último, supone un 10,3% (25.436 viviendas no principales) del total; y también tiene un importante peso entre las viviendas localizadas dentro de Euskadi al alcanzar las 24.220 viviendas no principales dedicadas a este fin el 17,7% de las viviendas no principales que se ubican en la comunidad autónoma.


Estos tres usos destacados, considerados en su conjunto, representan algo más las tres cuartas partes de las viviendas no principales de los hogares vascos; el 76,1% (188.053 viviendas).


La Encuesta sobre Necesidades y Demanda de Vivienda concluye por otro lado que un 14,8% de la población de 18 a 44 años (94.975 personas) necesita acceder a su primera vivienda. Por su parte, se contabilizan 367.115 personas de ese grupo de edad que ya están emancipadas (57,0%), mientras que el restante 28,2%, aunque actualmente está sin emancipar, no indica necesidad.


Las casi 95.000 personas con necesidad de acceso representan el 34,3% de las personas sin emancipar que reside en las viviendas de sus progenitores, tutores u otros familiares (formado por un total de 276.730 personas).


Por otro lado, esta encuesta también identifica que un 8,4% de los hogares vascos tienen necesidad de cambiar de vivienda (77.369 hogares); mientras que el 8,2% de hogares (75.620 hogares) indican que su vivienda necesita de algún tipo de rehabilitación, bien en elementos comunes del edificio, bien en propios de la vivienda, por un importe superior a los tres mil euros.


De las 94.975 personas de 18 a 44 años que en 2023 tienen necesidad de acceso a una vivienda, 70.012 personas disponen de ingresos o rentas propias (10,9% de la población de dicho grupo de edad); mientras que las restantes 24.962 no disponen de ingresos propios (3,9%).


Para cubrir la necesidad de acceso a una vivienda de las personas de 18 a 44 años con ingresos o rentas propias sin emancipar se estima que serían necesarias 63.378 viviendas en Euskadi. Esta cifra se incrementaría hasta las 86.764 viviendas si se añaden las 23.386 viviendas necesitadas por las personas que actualmente carecen de ingresos.