La globalización y los nuevos modos de vida tienen su incidencia directa en el dato de población de alaveses residentes en el extranjero con una imparable tendencia al alza. La diáspora alavesa a cualquiera de los lugares del planeta se ha incrementado en un 41,43% en los últimos diez años, según el padrón de españoles residentes en el extranjero (PERE) del Instituto Nacional de Estadística consultado por DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA.
La última entrega de ese padrón, con fecha 1 de enero de 2023, eleva a 11.090 la cantidad total de alaveses residentes más allá de las fronteras del territorio. Si se retrocede una década en el calendario, en el año 2014, esa cifra era de únicamente de 6.495. Desde entonces se ha ido incrementando del manera progresiva y sostenida para comenzar el presente ejercicio con esos 11.090 alaveses repartidos por los cinco continentes del globo.
Un 3,3% del total del censo
Son 4.595 los alaveses que durante esta década han hecho las maletas por diversas causas con un promedio de medio millar anuales. En el último cambio de hoja de calendario esa cifra de quienes emprenden la aventura en el extranjero fue de 307 personas, para pasar de los 10.683 del año 2022 a esos poco más de once mil con los que se ha iniciado este año. Son números mas recortados si se analiza, por ejemplo, el salto del año 2021 a 2022, cuando se disparó la marcha al exterior con 630 alaveses que optaron por probar fortuna en los destinos más variopintos. Más acusado fue el cambio de 2019 a 2020, cuando fueron 648 alaveses. La pandemia también se dejó sentir y tuvo su efecto en forma de freno, ya que solo hubo 346 nativos de este territorio que decidieron liarse la manta a la cabeza para rebasar las fronteras en medio de la incertidumbre que ocasionó la explosión del coronavirus. Con ese cupo de los más de once mil alaveses residentes en el extranjero se alcanza un 3,32% del total de población que suponen los 334.412 alaveses residentes en el territorio al inicio de este año, según los últimos datos del INE.
A la hora de radiografiar y diseccionar esa amplia porción de 11.090 residentes en el extranjero, destaca la paridad entre sexos. Un 50,51% son varones (5.602) frente al 49,49% de alavesas que integran ese colectivo (5.488). Únicamente hay una diferencia de 116 hombres más que mujeres lejos de las fronteras que delimitan Álava.
La minuciosidad del padrón de residentes en el extranjero posibilita también descender al detalle de los diferentes grupos de edad en los que se reparten esos once mil alaveses en la diáspora. Un total de 6.640 de ellos encajan en la franja de edad entre los 16 y 64 años. De esta mayoritaria presencia (59,88%) en ese abanico de años, se puede deducir que la mayoría de los alaveses residentes lejos de su hogar se encuentran en aquellos destinos debido a cuestiones laborales en una amplia mayoría. Por debajo de los 16 años son 2.735 alaveses y pertenecen a menores que pueden estar cursando sus estudios en algún centro educativo de prestigio y nivel o corresponden también a hijos de matrimonios en los que una o las dos partes son alaveses. Por último, el grupo de edad menos habitual entre este colectivo de residentes son los mayores de 65 años. Únicamente son 1.715 los conciudadanos del territorio que ya están jubilados y disfrutan de su retiro lejos de Álava.
En 62 países de los 5 continentes
La legión de alaveses disgregados por los puntos más insospechados del planeta alcanza todos los continentes del globo terráqueo. La proximidad y cercanía sitúa Europa como el lugar donde más convecinos de estos lares se puede uno encontrar (5.365) si decide darse una vuelta por el Viejo Continente. El hecho de tener que hacer la maleta para cruzar el Atlántico tampoco es señal que espante a los alaveses para encontrarles asentados en cualquier lugar de América, tanto en los países del norte como en el sur. Es el segundo continente más colonizado de alaveses con 5.085.
Los tentáculos alaveses llegan también hasta las profundidades de África, con 291 alaveses detectados por el PERE. La exótica Asia también ha seducido a un buen puñado de nacidos en estas tierras (223) y para completar el repóquer de alaveses en el mundo también en Oceanía hay 126 alaveses. La fascinación y por las antípodas ha llevado hasta aquel lejano continente a 126 alaveses que tienen fijada su residencia en Australia, mientras hay otros 17 que están repartidos por alguna de las dos islas que dan forma a la lejana Nueva Zelanda.
Retornando a unas latitudes más cercanas y con Europa como principal destino de los alaveses que cruzan los Pirineos (5.365), también por una cuestión de cercanía, Francia es el país donde puede resultar más fácil toparse con algún convecino salido de estas tierras (2.015). La extensa orografía del otro lado del Bidasoa es el país que, de largo, ha cautivado a más alaveses. A distancia (1.284) le sigue Gran Bretaña como destino en el que puede encontrarse uno con más alaveses de Europa. Ni las dificultades surgidas tras la agónica salida de los británicos de la Unión Europea ha echado para atrás quienes allí están. Muchos de ellos llegaron seducidos por los elevados sueldos y los reclamos que aquí se hicieron a sectores como el sanitario, para desarrollar su trabajo una vez finalizadas las prácticas y con el paso de las décadas resulta cada vez más complicado volver a la tierra que a uno le vio nacer. Alemania es también punto de residencia habitual con 772 alaveses. La neutral Suiza es el cuarto país más numeroso donde están afincados 302 alaveses, seguido de los 290 de Bélgica y los 118 de Italia. La anécdota dentro de Europa se encuentra en los 47 alaveses que tienen fijada su residencia en Andorra.
Los que han tenido que cruzar el charco se han decantado de forma abrumadora por Argentina (1.486) ayudados además por el hecho de no tener que desenvolverse en otro idioma. El sueño americano ha atrapado a 713 alaveses que están diseminados por el país de las barras y estrellas. Otros dos países hispanos como México (551) y Chile (549) son destinos preferidos de alaveses.