Después de quince años y ocho millones de euros gastados, el doble de lo presupuestado inicialmente, el Ayuntamiento de Vitoria todavía tendría que desembolsar más dinero si quiere que el depósito de tormentas de Yurre, aún sin estrenar, comience a funcionar. En juego están los 2,8 millones de euros de fondos europeos que la UE concedió a Vitoria para mejorar el saneamiento de la ciudad.

Reconoce la concejala de Acción por el Clima, Ana Oregi, que esta de hace quince años, con el PP en el gobierno municipal, estuvo mal planificada y mal ejecutada, razones por las que nunca funcionó. Además, la caseta de mando se instaló debajo de una línea de alta tensión y no se llevaron a cabo las obras complementarias necesarias para el buen funcionamiento del tanque de lluvias; obras de relevancia como los trabajos de prevención de inundaciones en los ríos del sur de la ciudad.

A pesar de todos los errores cometidos en el pasado con esta construcción, el Ayuntamiento va a seguir defendiendo ante Europa que la ayuda económica recibida se utilizará para el fin para el que se concedió, es decir, para mejora el saneamiento de la ciudad.

Considera la edil de Acción por el Clima que a esta defensa ayudará el hecho de que la intervención en los ríos del sur de Vitoria ya está en marcha y su gobierno ha llegado a un acuerdo con Red Eléctrica para cambiar la ubicación de la caseta levantada en una zona ilegal debido al paso de una línea de alta tensión.

“Nefasta” gestión

Una vez escuchada la intervención de Oregi, toma la palabra EH Bildu para recordar que en 2015, la Comisión Europea preguntó por el estado de la obra del depósito de tormentas de Yurre financiada con su dinero. Y advirtió de que si la instalación no empezaba a funcionar, Vitoria tendría que devolver la ayuda de 2,8 millones de euros.

En 2016, el alcalde, Gorka Urtaran, envió una carta asegurando que el Ayuntamiento tenía previsto poner en marcha el depósito de tormentas en 2020, algo que no sucedió. Por ello, EH Bildu critica la mala actuación del gabinete Urtaran. “A la nefasta gestión iniciada por el PP, se suman ahora PNV y PSE”, censura la edil Amancay Villalba.