La reciente asunción de la competencia sobre el tramo alavés de la AP-1, el desdoblamiento de vías de tránsito elevado como la N-124 y la mejora de carreteras como la A-625 entre Amurrio y Orduña o la N-240; así como el aumento de costes del mantenimiento de carreteras elevarán en un 30% el monto para tener la red viaria alavesa en buenas condiciones. La Diputación Foral de Álava aprobó ayer la licitación de los dos nuevos contratos de conservación y mantenimiento para el periodo entre el 1 de febrero de 2023 y el 1 de febrero de 2026, por un importe total de 34,4 millones de euros, a razón de 11,5 millones de euros anuales, que supone el incremento mencionado.

La conservación de los 1.400 kilómetros de la Red Foral de Carreteras se ha adjudicado mediante dos contratos diferentes cuyo adjudicatario se responsabilizará del mantenimiento de las carreteras alavesas de acuerdo a su ubicación geográfica: zona este y zona oeste del territorio.

Estos contratos contemplan la vigilancia del estado de las vías para detectar y paliar eventuales anomalías en el funcionamiento la carretera y la circulación o la atención a emergencias como accidentes graves, caída de árboles o desprendimientos, durante las 24 horas y los 365 días al año. La empresa adjudicataria también se encargará de la limpieza y mantenimiento de calzada, arcenes, arquetas, drenajes, barreras o luminarias, así como de las siegas, desbroces y podas de árboles, arbustos y hierba que afecten a los elementos de la carretera.

En relación a la vialidad invernal, el contrato estipula el apoyo a los medios propios de la Diputación con maquinaria pesada y vehículos, y además corre a cargo de la empresa la reposición y reparación de señales, balizamiento y elementos de seguridad; la instalación de nueva señalización vertical y elementos de contención, la renovación y reparación de firmes o la ejecución de estructuras y obras de fábrica (muros de escollera o contenciones para desprendimientos).

Criterios medioambientales

Como novedad, los pliegos de condiciones de estos dos nuevos contratos incluyen, entre los criterios de valoración de las ofertas, la inclusión de mejoras medioambientales como la acreditación de vehículos ligeros con distintivo ambiental Eco y Cero Emisiones; y el empleo de materiales y técnicas constructivas respetuosas con el medioambiente, como la reutilización de residuos o reciclados.

Centro de COntrol de Carreteras

El Consejo de Gobierno Foral también licitó ayer el nuevo contrato de gestión, mantenimiento y explotación del Centro de Control de Carreteras de la Diputación Foral de Álava para el trienio 2023-2026, por un importe de 2,6 millones de euros. La principal novedad de los pliegos del nuevo contrato es la inclusión en las mismas del mantenimiento de la estación de bombeo de Armiñón.

El Centro de Control de Carreteras centraliza toda la información sobre el estado de la red viaria y asume entre otras funciones la planificación y ejecución de los dispositivos de vialidad invernal que garantizan la circulación en episodios de nieve y hielo, la gestión de las obras y la respuesta ante situaciones de emergencias que afecten o pueden afectar a las carreteras alavesas, como inundaciones, vientos huracanados, desprendimientos o accidentes de tráfico. Asimismo, informa a la ciudadanía sobre el estado de las carreteras y diversos trámites administrativos y ofrece un servicio de 24 horas en caso de emergencia.

Por último, el Consejo de Gobierno aprobó ayer la certificación final de las obras de mejora de la carretera A-3226 a su paso por Moreda de Álava, que han supuesto la inversión de más de 750.000 euros.