El grupo Populares Alaveses se ha quedado solo ante los resultados de un año de trabajo de la ponencia de Vías de Alta Capacidad del Territorio Histórico de Álava, al votar en contra de las conclusiones frente al consenso obtenido por parte del PNV, PSE, HB Bildu y Elkarrekin-Podemos, en la Comisión de Infraestructuras de Juntas Generales de Álava.

En el turno de explicación de voto, el PP argumentó su negativa porque las vías ya están construidas, porque entienden que las autovías deben ser públicas y gratuitas, porque la aplicación de pago supondrá 700 euros para particulares y 1.200 euros al mes para transporte de mercancías, aumentará la siniestralidad, el peaje castigará a la zona despoblada y dañará al futuro del medio rural.

La postura del PP ocasionó la crítica de todos los grupos, que calificaron al los populares de realizar un ejercicio de irresponsabilidad, de faltar el respeto a los expertos que han pasado por la Ponencia explicando su experiencia y de fallar a los alaveses y alavesas.

Punto de partida a futuro

La aprobación por los cuatro de los cinco grupos que integraban la Ponencia no es una carta blanca, si no un acuerdo de partida porque en el futuro irán planteado mociones para mejorar, ya que hasta la próxima legislatura no se tomarán decisiones ejecutivas sobre el pago por uso o por contaminan.

En cuanto al acuerdo, como ya anunciara DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA el pasado día 11 de junio, se trata de una decena de resoluciones. En primer término, se mandata a la Diputación a realizar un estudio técnico, que deberá determinar las características técnicas, las tarifas, las vías y los tipos de vehículo sobre las que será de aplicación, así como el sistema de cobro que deberá ser, de acuerdo a normativa europea, un sistema free-flow o sin barreras.

Por otra parte, se deberá concretar antes de 2026 el sistema de financiación y gestión de los 55 kilómetros de la AP-68 que discurren por territorio alavés; la revisión de las bonificaciones y la medidas de apoyo al transporte con domicilio fiscal en Álava.

Encargo a Arabat

En las resoluciones de la ponencia no olvidan la implicación de los ciudadanos y se reclama campañas de divulgación y comunicación social que permitan dar a conocer los beneficios de la aplicación del nuevo modelo de financiación para dotar a nuestras vías de una mayor seguridad y fiabilidad. Por último, se encarga a Arabat, como empresa pública foral que gestiona la explotación de la AP-1, la gestión del nuevo modelo de financiación de las vías de alta capacidad de Álava, se reclama establecer mecanismos entre los diferentes territorios que garanticen la coordinación, la coherencia y la accesibilidad de la población y se plantea el refrendo del proyecto por parte de la Comisión Europea.

También se ha consensuado que los recursos que se generen mediante el nuevo modelo de financiación serán dirigidos a la conservación y a la mejora de las vías, la calidad de sus servicios, así como la implantación de las medidas correctoras que minimicen los impactos ambientales de las vías de alta capacidad, y deberán permitir liberar recursos públicos para garantizar políticas de mejora y fomento del transporte público y la movilidad sostenible (ciclista, a pie).