- El Consistorio de Vitoria seguirá adelante con el calendario de tramitación de ingresos extraordinarios, tras los votos favorables de PNV, PSE y Elkarrekin y la abstención de EH Bildu y PP, que dieron ayer a la propuesta de modificación presupuestaria para que el Pleno decida si aprueba o no el próximo mes de junio el destino de los 27 millones de euros (27.822.490 euros) procedentes de esos 40 millones extra alcanzados que derivan de dos importes: por un lado, de los 32 millones procedentes de una liquidación positiva del Fofel y por otro, de un remanente líquido de 8 millones.
Como explicó el edil de Hacienda, Iñaki Gurtubai, hasta 12 millones de euros, de esos 40 millones alcanzados como ingresos extraordinarios, el alcalde los puede designar vía decreto, algo que “firmará en las próximas horas”, mientras que el resto, esos 27 millones, tendrán que ser tramitados por el Pleno.
Tal y como se anunció el pasado 8 de abril, esos 40 millones de euros el equipo de gobierno los ha destinado a “tres grandes líneas”:6,6 millones para ayudas a familias y empresas, 18,8 millones para inversiones y 14,5 para partidas que tienen que ver con un rigor económico “para ser prudentes en un escenario de cierta incertidumbre”.
En el turno de grupos, Óscar Fernández, de Elkarrekin, puso de relieve el acuerdo al que su coalición llegó con el Gabinete Urtaran, “teniendo en cuenta la pandemia y con el fin de avanzar hacia una sociedad más justa, feminista y verde”, por el que lograron incorporar propuestas por 2,3 millones, como la rehabilitación del Casco (600.000), destinada a ayudas correspondientes a las solicitudes del 2019, o los 400.000 euros para la cocina del CIAM San Prudencio, entre otras.
Elisabeth Ochoa de Eribe (PP), censuró que “ustedes siguen en un mundo en el que no existe crisis e invierten solo un 0,52% en comercio y un 0,85% en empleo. Esas son sus prioridades”. Para Marian Gutiérrez (PSE), en cambio, es “un buen acuerdo porque estos recursos nos permiten ahondar en políticas fundamentales para la ciudadanía”.