El barrio de Zabalgana de Vitoria-Gasteiz ha acogido este jueves diversas actividades en apoyo a la niña de doce años a la que varios jóvenes acosaron y amenazaron por llevar una bolsa con la bandera LGTBI.
Los hechos fueron denunciados a finales de agosto por el padre de la menor a través de las redes sociales, en las que el progenitor de la niña explicó que su hija había vuelto "muerta de miedo" a casa, tras sufrir "amenazas y acoso" por parte de un grupo de jóvenes que le recriminaron que llevara la bandera multicolor que representa el movimiento LGTBI. Las amenazas hacia esta menor de edad --según denunció el padre-- se repitieron durante varios días por parte del mismo grupo de jóvenes.
Ante esta situación, el Observatorio contra la LGTBI+fobia Ikusgune, la asociación Vecinal Zabalgana Batuz y otros colectivos han organizado este jueves diversos actos en apoyo a esta niña de doce años.
Los actos se han desarrollado en el Skate Park del barrio de Zabalgana de Vitoria, donde se produjeron los hechos, bajo el lema 'LGTBI+ fobiarik ez! El odio no cabe en nuestras calles'.
El acto de este jueves ha tenido un marcado carácter festivo y en él muchos niños han participado dibujando, patinando y haciendo banderas arcoíris.
Los organizadores han leído un manifiesto en el que han denunciado que hay "muchos indicadores que reflejan que las mujeres, las personas LGTBI, las personas racializadas o con diversidad funcional no pueden hacer uso del espacio público como ellas desean, que las calles no son para todas las personas".
"Las calles y los parques, el día y la noche, son nuestros y quienes estamos hoy aquí tenemos la firme determinación de defender que en nuestros barrios no cabe el odio hacia las personas LGTBI, ni hacia las mujeres, ni hacia las personas migradas ni hacia ninguna de nuestras vecinas", han añadido.
El portavoz de Ikusgune, Amets Martínez de Eredita, ha recordado que el colectivo LGTBI "está siendo golpeado en la calle" y que la mayoría de los casos no se denuncian por múltiples razones.
Tras afirmar que este colectivo "ha perdido el miedo y va conquistando espacios", ha concluido que "tan importante como las denuncias ante los juzgados y la policía es la denuncia en la calle".
