- El curso escolar 2020/21 arrancará en Álava y el resto de Euskadi el lunes 7 de septiembre en la enseñanza no universitaria. Y lo hará, siempre que la situación epidemiológica así lo permita, con el alumnado y el profesorado presentes en las aulas, en el escenario uno de los tres que ha previsto el Gobierno Vasco para esta coyuntura excepcional. Así lo confirmó ayer la consejera vasca de Educación, Cristina Uriarte, tras la reunión del comité asesor del Plan de protección civil de Euskadi, reunido por primera vez tras la reactivación de la emergencia sanitaria en la CAV. Pese a esta imagen de aparente normalidad, el covid-19 y su preocupante evolución mandarán en una vuelta al cole del todo atípica.
Entre otras novedades,los estudiantes de ESO tendrán en su inmensa mayoría horario continuado de mañana durante todo el curso, se evitará el contacto entre alumnos de distintas clases y niveles en las etapas de Infantil y Primaria, habrá entradas y salidas escalonadas en todos los centros y sobre la mesa estará en todo momento la posibilidad de retroceder a un escenario de actividad lectiva mixta o incluso no presencial -de darse un nuevo confinamiento- en función de cómo evolucione la crisis sanitaria. Además, todas las actividades extraescolares que supongan pernoctación han quedado ya suspendidas de antemano.
Las resoluciones elaboradas por el Gobierno Vasco en torno al calendario y al inicio del inminente curso indican, en lo que respecta a la educación Infantil y a la Primaria, que las clases se impartirán en este escenario uno en jornadas de mañana y de tarde. También, que los centros escolares podrán dictar la eliminación de las horas lectivas de una de esas tardes a la semana siempre, eso sí, que no suponga una reducción del horario estipulado.
La principal novedad en estos niveles será la creación en todos los centros de lo que Cristina Uriarte denominó ayer como "grupos estables de convivencia", una fórmula con la que se tratará de evitar en la medida de lo posible la transmisión del virus en caso de que el covid-19 entre en un centro. En esencia, cada aula y su tutor deberán evitar mezclarse e interactuar con el alumnado de otras clases. De confirmarse casos positivos, el Gobierno Vasco ya ha avanzado que prevé "microconfinamientos" en las clases afectadas, cuyos estudiantes deberán guardar cuarentena en sus domicilios durante dos semanas.
En lo que respecta a la educación secundaria (ESO), la práctica totalidad de los centros vascos, un 95,4% según las cifras de Uriarte, han optado por impartir las clases durante este inminente curso en horario continuado de mañana, una posibilidad que les brindó en junio el propio departamento de Educación. Esta circunstancia facilitará el empleo del horario de tarde en caso de que surjan problemas de cualquier índole y, por ejemplo, haya que desdoblar las aulas. Con todo, Uriarte matizó que en caso de que la situación epidemiológica se agrave y haya que "priorizar" la asistencia presencial de parte del alumnado se hará con el de "Infantil y Primaria", así como con los estudiantes "más vulnerables" en cuanto a necesidades educativas.
Educación también ha dado directrices a los centros, aún pendientes de concretar con ellos, en torno a la entrada y la salida del alumnado, que deberán ser siempre escalonadas, a los horarios de los patios, a la designación de personas referentes de covid en los colegios o a la conformación de comisiones de seguimiento.
Además, independientemente del nivel o los niveles que impartan, todos los centros deberán contar con un protocolo general de actuación frente al covid donde se recojan distintos aspectos relacionados con su organización interna y supeditados a los posibles escenarios futuros. Pautas tanto en torno al desarrollo de su actividad lectiva como más relacionadas con la comunicación y la coordinación en función de las circunstancias.
Además, los centros deberán elaborar un plan de contingencia propio que, según Uriarte, recoja "de manera clara" las medidas de seguridad, prevención o higiene que tomarán durante el próximo curso, y que deberán seguir las directrices marcadas en un documento previo elaborado por el Servicio vasco de Prevención y riesgos laborales.
Más allá de los protocolos generales ya elaborados, que marcan la obligatoriedad de mantener una distancia interpersonal de 1,5 metros, de usar mascarillas -salvo en el caso de los alumnos de Infantil-, de intensificar el lavado de manos o de reducir el número de participantes en las actividades de grupo, las áreas de Educación y Salud están "trabajando" en pautas más específicas en caso de darse casos de covid en los centros.
"Si fuera necesario, se priorizará la asistencia del alumnado de Infantil, Primaria y vulnerable"
Consejera vasca de Educación