espués de dos meses de confinamiento ayer dio comienzo la desescalada dentro de la fase 1 en Euskadi. En ella se permite la apertura de tiendas sin cita previa. Así lo hicieron ayer en Gasteiz librerías y tiendas de discos como Mara Mara y Old Tower Stuff, y también los vecinos de la Correría la librería Zuloa y la tienda de vinilos Vinylora, tras dos meses de sufrimiento, "ya que las facturas se tienen que seguir pagando". En el caso de Zuloa han estado cerrados todo este tiempo y no fue hasta el pasado miércoles cuando Txintxu San Martín, el propietario, se acercó a coger unos encargos. En Vinylora, por su parte, han estado cerrados pero han continuado con la venta online, algo que en Zuloa no han creído oportuno. "En nuestro caso hemos seguido haciendo la venta online, aunque desde el principio dijimos que no íbamos a exponer a los repartidores al coronavirus, por lo que muchos empezarán a venir ahora a por sus pedidos", confiesa Nagel Nalda, propietario de Vinylora.
Por otro lado, el estado de alarma ha afectado a cada comercio de Euskadi de forma totalmente distinta y por ello, creen en las dos tiendas consultadas, la situación debería analizarse de manera individual. En el caso de Zuloa, "hemos tenido que hacer un ERTE y hemos recibido ayuda del Gobierno, además de que alguna editorial nos ha aplazado los pagos". En Vinylora la situación no ha sido mucho mejor. "El estado de alarma nos ha llegado al año de la apertura y gracias a que la dueña del local nos ha perdonado el alquiler estos dos meses hemos podido aguantar mejor. Salió de ella y estamos muy agradecidos, ya que hemos tenido que seguir pagando otras facturas. Su gesto nos ha dado un tremendo balón de oxigeno", indica Nalda.
De esta forma se enfrentaron ayer al primer día de trabajo tras dos meses estos locales. Ambos explican que han tomado medidas de seguridad como entregar guantes o mascarillas en caso de que el cliente no tenga, señalizar la distancia de dos metros en el suelo o limitar el aforo en sus tiendas. Sin duda medidas necesarias para "la gente que ha empezado a recoger los encargos y que tenía ganas de oler el papel y la tinta", asegura San Martín.
Tanto en Zuloa como Vinylora confiesan que 2020 no será un año bueno y, además, hacen hincapié en la falta de turismo que habrá en Vitoria en los próximos meses. "La cultura ha abierto y es algo positivo pero tendremos que recuperarnos muy poco a poco", afirman.
"La gente ha empezado a venir a por encargos, muchos ya tenían ganas de oler el papel y la tinta"
Propietario de Zuloa
"El estado de alarma nos ha cogido al año de abrir y en 2020 notaremos la falta de turismo"
Propietario de Vinylora
