ste año no será Oion el lugar de la tradicional caracolada por la fiesta en honor al patrón de los alaveses, entre otras razones, porque las fiestas de San Prudencio, en esta localidad, en Vitoria y en otras tantas, se han suspendido por las limitaciones a la movilidad de las personas impuestas desde el Gobierno central. Sin embargo, la sorpresa ha llegado en Laguardia donde este molusco será protagonista de un concurso en el que pueden participar cuantas personas lo deseen… Eso sí, desde sus casas.
Desde la concejalía de Festejos de la villa medieval se venía trabajando desde hace meses en la posibilidad de poder celebrar una caracolada popular con motivo de las fiestas de San Prudencio. “Por desgracia -señalan desde el Ayuntamiento-, no va a ser posible, pero nos negamos a no celebrarlo sin caracoles”.
Como se preveía lo que iba a ocurrir, desde la corporación municipal hace semanas que se encargó una buena cantidad de kilos de caracoles a un productor. Y es que, lejos de conformarse con la rendición ante la fatalidad de la pandemia, se decidió que la caracolada se podía celebrar, aunque cada uno los tendría que cocinar en su casa y, además, la experiencia se podría convertir en un divertido concurso.
Para ello se publicitó en Laguardia que quien quisiera participar podría hacerlo comunicándolo al Ayuntamiento antes del próximo domingo. El lunes, desde las oficinas municipales, se llamará a los inscritos y se les comunicará en qué establecimiento de la villa medieval se deberá retirar un kilo de caracoles por cada apuntado. El resto de los ingredientes al gusto deberán correr por cuenta de cada uno.
Una vez elaborados los caracoles, y entre los días 26 y 28, los participantes deben enviar a un número de teléfono municipal dos fotografías por Whatsapp: una del proceso de elaboración y otra con la presentación final. Un jurado designado por el Ayuntamiento valorará el aspecto de la receta y otorgará el premio, que consiste en vino institucional, para acompañar de la mejor manera posible este guiso.
Aunque Oion no será este año el escenario de la caracolada que prepara siempre la misma cuadrilla, tanto esta localidad, como Laguardia y otras mantendrán la tradición de la tamborrada. Como es natural, no podrán ser en la calle, sino desde los balcones y ventanas. De esta forma, y según localidades, el atronar con las baquetas abarcará desde las seis de la tarde a las nueve de la noche según localidades.