l psicólogo y profesor de la Universidad de Burgos Fernando Pérez del Río ha elaborado, conjuntamente con dos expertos del País Vasco, Iñaki Markez y Patricia Insua, vinculados a Osasun Mentalaren Elkartea y a Osasun Eskubidearen Aldeko Elkartea; una guía de apoyo frente a las adicciones durante la epidemia del coronavirus. Esta guía, asumida por el Plan Nacional sobre Drogas, muestra cómo los cuadros adictivos se intensifican durante el confinamiento y los cambios que se están produciendo .
El coordinador explica que estamos ante una situación que puede suponer "mayores riesgos psicosociales a personas con trastornos adictivos, sin ir más lejos, la población consumidora de opioides, los antiguos heroinómanos, son una población cronificada que padece comorbilidad con otras enfermedades, lo cual evidencia que estemos ante un colectivo vulnerable".
Aunque han sido pocas semanas de aislamiento, los expertos advierten de "cuadros adictivos que se intensifican en algunos casos, y puede haber problemas que aumenten, por ejemplo el abuso de videojuegos o de juegos online y el consumo de sustancias legales, como los hipnosedantes, ansiolíticos€".
En las primeras semanas de confinamiento los medios de comunicación, destaca Fernando Pérez del Río, "nos hablaban de un aumento de la compra de cerveza en supermercados, aunque este hecho nos puede llevar a una interpretación errónea de la realidad ya que no debemos interpretar que se consume más alcohol; pues hay que recordar que los bares están cerrados. Por contra, es muy posible que disminuya el consumo de sustancias ilegales: hachís, cocaína, heroína u otras sustancias psicoactivas, puesto que ha disminuido significativamente la oferta en el mercado a causa de la situación de estado de alarma y el miedo al contagio, y esto, para no pocos pacientes, se ha convertido en una oportunidad para cesar los consumos de forma definitiva".
Por ello, algunas personas adictas han vuelto a casa generando situaciones inesperadas, "y también estamos comprobando tristemente que muchos pacientes que hasta ahora podían ganarse la vida trabajando han perdido su trabajo, o regresan al alambre de la pobreza".
A esto se une que la crisis del coronavirus ha obligado a los centros asistenciales de drogodependencias a reorganizarse forzosamente, están realizando servicios mínimos, mantienen el suministro de metadona y la asistencia telefónica (psicológica y social).
Para tratar de ayudar, la guía propone algunas ideas para estos días, como establecer rutinas, respetar horarios de forma flexible, que incluyan higiene diaria, limpieza del hogar, alimentación saludable, espacio para tareas obligatorias y de ocio, así como hacer ejercicio físico en casa. Además, propone intentar gestionar pensamientos negativos. Insiste en que es más que conveniente mantener contacto con la familia y buscar la complicidad de amistades o compañeros de trabajo mediante videoconferencias o llamadas, pues es importante sentirse parte de un grupo.
Asimismo plantea aprovechar estos días para expresar emociones, así como fomentar la creatividad, ya que tal vez sea un buen momento para desarrollar una afición nueva o retomar esas que se habían apartado.
Pérez del Río explica que, como han ido comprobando, esta puede ser una excelente oportunidad para las personas con trastornos adictivos para encerrarse, sanarse, y seguramente en pocos días se sentirán mucho mejor.