VITORIA - Los vecinos de los números 40 y 42 de la calle Santo Domingo cumplen dos años sin poder pisar sus domicilios después de tener que abandonar de manera precipitada sus inmuebles a media tarde del lunes 30 de octubre de 2017 ante el inminente peligro de derrumbe del edificio. Hace veinte días la situación volvió a repetirse en el céntrico número 8 de la calle Dato. Sin embargo, la solución de uno y otro caso es diametralmente opuesta. Los 19 desalojados de Dato ya han podido disfrutar del calor de sus domicilios este fin de semana, sólo tres semanas después de tener que salir en estampida por el daño en un pilar de la primera planta.

Aprovechando con este desgraciado segundo aniversario, los afectados de Santo Domingo volvieron ayer al primer plano de la actualidad para reclamar atención sobre su caso. “Hemos comprobado que el Ayuntamiento, con su alcalde a la cabeza, ha actuado de manera muy distinta a como lo hizo con el vecindario de Santo Domingo”, indicaron en la lectura del comunicado. Mañana miércoles se van a cumplir 24 meses desde aquella fatídica tarde y “estamos aquí otra vez dos años después sin ninguna novedad que contaros. Quizás ésta sea la noticia. Estamos igual que el 30 de octubre de 2017”, enfatizaron los portavoces de Santo Domingo Bizirik. “Estamos en un barrio al que el Ayuntamiento no ha dedicado ni un solo euro a inversiones reales en los tres últimos años. Existe un problema que se quiere silenciar, señalando como únicos culpables a los propietarios ante la opinión pública. Pero hay una responsabilidad política que no se ha asumido desde hace muchos años”, criticaron con rotundidad.

Esta situación de abandono institucional lleva a “exigir” al Ayuntamiento, al equipo de gobierno y al resto de grupos políticos que trabajen de manera “inmediata en un plan de rehabilitación integral del barrio. Exigimos una solución ya. Los vecinos ya no tenemos más tiempo, que a las instituciones parece sobrarles”, reivindicaron.

La inminente celebración de Halloween les lleva a plantear una curiosa petición al gabinete Urtaran. “Invitamos al equipo de gobierno a pasar miedo el jueves 31 a las 21.00 horas delante de los portales 40 y 42 de Santo Domingo”, retaron ayer con la esperanza de que esta iniciativa sirva para dar a conocer la situación que padecen desde 2017.

Dos años desalojados. Un informe de los arquitectos municipales confirmó el “peligro de derrumbe de la medianera de ambos edificios y, por efecto dominó, del resto de la estructura” en los portales afectados. Detectó dos grietas en la escalera y en el pasillo del primer piso del portal 42 de Santo Domingo.

Los vecinos afectados detallaron ayer su situación cuando se cumplen 24 meses desde que salieron en estampida por el riesgo de derrumbe del edificio.