VITORIA. A las 23.30 horas del sábado, una patrulla se personó en un domicilio de Zabalgana por una fuerte discusión de pareja en la que se escuchaban amenazas de muerte y a una mujer llorar y gritar. Tras escuchar a ambas partes y a los testigos que avisaron a la Policía, los agentes procedieron a la detención del varón, de 48 años, que pasó ayer a disposición judicial.

Otro hombre de 33 años fue detenido ayer como presunto autor de un delito de violencia de género.

Una llamada ciudadana alertó a la Policía Local de que una mujer se había precipitado desde un primer piso de un inmueble de Adurtza. Una patrulla se dirigió a la vivienda y les recibió un varón que se encontraba con una mujer tendida en la cama, dolorida y con los tobillos hinchados.

Al parecer, minutos antes habían tenido una discusión de pareja y el varón había impedido a la mujer salir del domicilio por lo que ésta optó por descolgarse de la ventana, cayendo y resultando herida. En vista de las circunstancias, los agentes procedieron a su detención por violencia de género y coacciones a su pareja.

Atentado a agentes Por otro lado, agentes de la Policía Local detuvieron el sábado a un joven de 22 años como presunto autor de un delito de atentado a agentes de la autoridad con lesiones leves.

Desde una vivienda del Casco Medieval se solicitó presencia policial porque se estaba produciendo una fuerte discusión entre las personas residentes. Una patrulla observó restos de cristales frente al inmueble y a un individuo asomado a la ventana.

Los agentes subieron y, tras varios intentos, consiguieron que les abrieran la puerta. Localizaron al varón quien, según su compañero de piso, portaba un cuchillo. Al dirigirse al joven, éste a arremetió contra uno de los agentes, por lo que procedieron a su detención y a incautarle el arma blanca que portaba. Tras la confección de las oportunas diligencias al Juzgado, fue puesto en libertad.

Agentes de la Policía Local detuvieron ayer a una mujer de 42 años como presunta autora de sendos delitos de agresión a agentes, resistencia y desobediencia graves, violencia doméstica, conducir bajo la influencia de bebidas alcohólicas y negativa a realizar las pruebas obligatorias.

Un taxista solicitó presencia policial en la calle Bulevar de Euskal Herria donde un vehículo se había cruzado por delante, obligándole a parar. De él bajó la conductora que, en estado muy alterado, empezó a agredir a su cliente, ex pareja de ella.

Ya en el lugar, los agentes requirieron a la mujer que realizara la prueba de alcoholemia, pero se negó. Además, intentó marcharse del lugar invadiendo a pie la calzada en varias ocasiones, haciendo caso omiso a las indicaciones de la patrulla, por lo que finalmente fue detenida. Esta mañana ha pasado a disposición judicial.

Un hombre de 28 años, sobre el que pesaba una requisitoria judicial, fue detenido ayer por la Policía Local tras causar problemas en un salón de juegos de la calle Portal de Legutiano.