VITORIA - La irrupción de un nuevo actor como el bus eléctrico inteligente (BEI) en el complicado tráfico por las calles de la capital alavesa acarreará un efecto notable. Así se recoge en el avance del plan de movilidad presentado la pasada semana y que analiza las consecuencias de la entrada en servicio del bus eléctrico en el último trimestre del año próximo. La primera y más evidente consecuencia va a ser la reducción de la velocidad media en un 4,1% con respecto a la situación actual en la red básica de la ciudad y en una jornada laborable media. Según los cálculos elaborados por Salvador Rueda y su equipo, la velocidad media pasará de los 34,1 kilómetros por hora actuales a los 32,7 a los que circularán los vehículos por el casco urbano. Ese incremento del 4,1% que registren los velocímetros de los vehículos se va a ver acompañado de un “aumento de la congestión y la distancia media de circulación”, recoge el denso documento de 421 páginas elaborado por el especialista catalán. Los concienzudos estudios del terreno que realiza el urbanista Salvador Rueda concretan, además, que el número de vehículos por hora contabilizados en las calles subirá un 3,14%. Frente al volumen de 30.982 unidades de la actual configuración de la trama viaria, en ese nuevo escenario que genere la llegada del BEI se va a ver incrementada la masa de vehículos por hora hasta los 31.957, es decir 975 coches más en las calles.
La saturación del tráfico en las calzadas es otro factor que se va a reflejar cuando los vehículos eléctricos que se introduzcan en el recorrido de la actual línea Periférica empiecen a prestar servicio. Frente a los 17 tramos que ahora soportan un índice de saturación superior al 95%, esta cifra pasará a ser de 23. La hasta ahora endemoniada circulación por el casco urbano se verá sometida a una nueva vuelta de tuerca con los carriles exclusivos de circulación por los que transitará el BEI durante gran parte de los 10,4 kilómetros de su recorrido.
Hay un último dato que aporta sobre el panorama de ese futuro escenario que surgirá dentro de año y medio. La tercera variable que va a sufrir un incremento es la distancia media recorrida en esos desplazamientos del vehículo particular. Frente a los 5,33 kilómetros de promedio que recorre un vitoriano en la actualidad al volante de su propio coche, se estima que se producirá un incremento para completar 5,37 kilómetros, es decir un 0,7% más.
otros escenarios y actores Las simulaciones que ha llevado a cabo Salvador Rueda contemplan todas las configuraciones posibles del panorama de Gasteiz con la revolución que se avecina en la movilidad. Una radiografía previa llegará cuando el tranvía complete su primera extensión con la llegada de los convoyes al barrio de Adurza y la zona universitaria. Se espera que para “finales de este año o en los dos primeros meses de 2020” se pueda contemplar al gusano verde completando esos recorridos, según concretó ayer la responsable municipal de Movilidad, Amaia Barredo. La repercusión de su entrada en servicio va a ser prácticamente inapreciable. La velocidad media de circulación va a registrar un testimonial incremento, para subir de los 34,1 kilómetros por hora, a los 34,2. Los tramos saturados de circulación y presencia de vehículos se van a mantener inalterables en los 17 actuales al tiempo que la distancia media de cada recorrido va a sufrir otra inapreciable subida de 0,03 kilómetros.
Hace también una previsión Salvador Rueda del escenario de circulación con el tranvía al sur, el BEI y el futuro que llegue a Salburua. En esa situación, la velocidad media sufrirá un notable frenazo (5,8%) para pasar de los 34,1 kilómetros por hora actuales a quedarse en los 32,2, una cifra por debajo que lo que sucederá con solo el BEI funcionando. Cuando se complete el puzzle de la movilidad, con el soterramiento, la velocidad media en Gasteiz serán de 32,9 kilómetros por hora.
Bus eléctrico inteligente. La actual línea Periférica de Tuvisa pasará a contar, a finales del año próximo o inicios de 2021, con unos modernos autobuses eléctricos que realizarán el servicio. Serán 7 vehículos de 18 metros de longitud y media docena de 12 metros de la marca Irizar. No emitirán ningún tipo de gas contaminante a la atmósfera al ser los primeros de la flota de Tuvisa que destierran los combustibles fósiles.
Itinerario. Recorrerán un trazado de 10,1 kilómetros por 14 barrios y 24 paradas en cada sentido.
32,7
Kilómetros por hora. Es la velocidad media que alcanzarán los velocímetros de los vehículos privados que circulen por las calles de la capital en el escenario cuando el BEI esté en funcionamiento. Su implantación va a suponer un “efecto notable, pero asumible”, matiza Salvador Rueda en su estudio. En la actualidad, la velocidad media en la red básica y en un día medio laborable asciende a 34,7 kilómetros por hora.
3,14%
Incremento de vehículos. La presencia de vehículos en las calles de Gasteiz para convivir con los modernos vehículos inteligentes también sufrirá un incremento. Frente a los 30.982 que ha estudiado el urbanista catalán que ocupan las calles en la actualidad, la aparición del BEI ocasionará una irrupción de 975 vehículos más para llegar a los 31.957 que ha calculado el padre de la movilidad de Gasteiz.