vitoria - Los exteriores y los pasillos de las facultades de Letras y Farmacia y del aulario Las Nieves de la UPV/EHU mostraban desde primera hora de la mañana de ayer una imagen ya clásica en estas fechas, dibujada por los nervios, los repasos compulsivos a libros y apuntes y también más de una ojera después de una larga noche. Faltaban unos minutos para que a las 9.00 horas arrancase la convocatoria ordinaria de la Evaluación de Acceso a la Universidad (EAU), el peaje necesario que cientos de alumnos del territorio deben atravesar todos los años para seguir escribiendo su currículum académico, y la tensión comenzaba a respirarse en el ambiente.

La primera de las tres jornadas que comprenden la antigua Selectividad arrancaría con los exámenes de Lengua vasca y Literatura e Historia de España. Por la tarde, se reanudaría con una o dos pruebas por estudiante correspondientes a su modalidad de Bachillerato. Había que empezar con buen pie porque, como se suele decir, lo que bien empieza bien acaba y porque de la nota de esta suerte de maratón dependerá el futuro de la mayoría. Y llegó el primer examen, que muchos calificaron como asequible y sirvió para armarles de confianza antes de enfrentarse a uno de los huesos de toda la EAU.

un buen inicio Uno de los protagonistas del examen de euskera fue el escritor Bernardo Atxaga y su artículo de opinión Nora joan dira ilusio zaharrak?, que el alumnado tuvo que analizar. A la salida, rostros y sensaciones de satisfacción generalizada como las que compartían Nahia Nafarrate, Ángela Delgado e Irune Alonso, estudiantes de Ikasbidea que aguardaban a la segunda prueba del día tomando el hamaiketako. “Tranquilas”, aunque a la vez exigidas por la necesidad de sacar buena nota para acceder a los estudios superiores que desean, Estudios Globales y Farmacia en el caso de las dos primeras. Muy cerca, Joel Larrubia y Marta Estévez, de Koldo Mitxelena, lamentaban haberse quedado un poco “cortos” en uno de los ejercicios del examen, pese a que no lo vieron muy difícil. Menos claro lo tenía con el siguiente su compañera Ainhoa Olalde, que apelaba a la “suerte” para superar la prueba de Historia.

Al otro lado del jardín exterior del aulario se encontraban también esperando a la siguiente prueba y relativamente relajados Ibon Vales, Iker García y Javi Garabal, de Laudio Institutoa, que también apuestan por iniciar el año que viene sendos grados universitarios: Psicología, Enfermería y Filología Inglesa, respectivamente, aunque el tercero, vecino de Orozko, se reserva también la carta de estudiar para guarda forestal. Tras una prueba inicial de euskera que en general marchó “bien”, estos tres compañeros preferían no hacer muchas quinielas con lo que vendría más adelante. “Es mejor ir tranquilo que ir apurado y nervioso. Que salga lo que salga”, apuntaba Javi. “A mí me gustaría que cayera la República y la segunda parte del franquismo”, anhelaba Iker.

Sus deseos casi fueron órdenes, porque en una de las dos opciones que el alumnado tuvo que elegir en el posterior examen de Historia cayó la época de consolidación y crisis de la dictadura franquista y, en la otra, el manifiesto del Frente Popular de 1936, redactado en los últimos compases de la II República previos a la Guerra Civil. Otras materias entre las que los estudiantes tuvieron que elegir fueron la abolición de los Fueros vascos en 1876 y la industrialización en el País Vasco.

Para Noemi Vilches, Marina Caño y David Lobo, estudiantes de Marianistas pero exentos de la asignatura de euskera -los dos últimos vienen de Miranda de Ebro y estudiaron allí desde pequeños-, el de Historia fue por tanto el primer examen del día. “Me parece uno de los exámenes más duros por así decirlo, porque hay mucha materia. Y al final te la juegas a uno o dos temas, porque la gente no se suele estudiar todo. Estamos nerviosos, pero bueno”, reconocía Marina. ¿Una preferencia? “El franquismo o la Segunda República”, también compartida por David. Premio para ambos, a quienes les gustaría estudiar Psicología y Biología, respectivamente. A Noemi, entretanto, le tira ADE, un grado que no exige una nota demasiado alta en la UPV/EHU de Gasteiz.

Superados los nervios de la jornada matinal, la tarde siguió con las pruebas de Química, Latín II y Diseño -primero- y de Matemáticas aplicadas a las Ciencias Sociales II, Dibujo Técnico II y Artes Escénicas -después-. La EAU, en la que el 59,52% del alumnado alavés -un total de 875 jóvenes- ha optado por realizar el examen en euskera, se reanudará esta mañana con el examen de Lengua Castellana y Literatura, una de las cinco pruebas de la fase de acceso de esta nueva Selectividad que mañana se cerrará. Los resultados se publicarán el próximo jueves 14.

Arranque con nervios. Como suele ser habitual, la tensión y los repasos de última hora marcaron la primera jornada de la Evaluación de Acceso a la Universidad (EAU), donde el alumnado tuvo que examinarse de Lengua Vasca y Literatura, Historia de España y una o dos materias de modalidad.

Hoy y mañana. La prueba se reanuda esta mañana con el examen de Lengua Castellana y Literatura y concluirá mañana al filo de las 12.45 horas con los exámenes de Física, Historia de la Filosofía y Lengua Extranjera II.

59%

Del alumnado alavés va a realizar este año la Evaluación de Acceso a la Universidad (EAU) en euskera, una tasa que no ha dejado de crecer en los últimos años.